Sanidad da un paso más en la reversión de Dénia y Manises

No hay nada decidido todavía, al menos así lo ha dicho por activa y por pasiva el conseller de Sanidad Marciano Gómez pero aun así la Conselleria de Sanidad sigue haciendo camino para tenerlo todo preparado por si, finalmente, la administración recupera a manos públicas la gestión de las áreas de salud de Dénia y Manises el año que viene, una vez acaben los contratos privados tal como previó en su día el Botànic.

Siguiendo esta política de mantener abiertas las dos vías, la conselleria ha dado un paso más y ha iniciado la licitación de los diferentes servicios que la administración tendría que contratar si asume la gestión de los dos departamentos, como ha informado esta mañana la agencia EFE.

Sanidad trabaja en el papeleo "por si" finalmente se revierten las áreas de Dénia y Manises

Así, tal como adelantó el conseller en su comparecencia ante les Corts del pasado 21 de septiembre, la administración sigue adelante con el "papeleo" y ha publicado en la plataforma de contratación del sector público un anuncio previo con la licitación de los servicios que tendrían que contratar de forma externa en cada uno de los departamentos, "los pliegos de mantenimiento" a los que Gómez se refirió en su comparecencia.

18 millones de euros en contratos

Según la plataforma, en el área de salud de Dénia, la conselleria estima que tendría que contratar servicios por un valor de 8,7 millones de euros. En Manises, la cifra subiría a 9,2 millones de euros. En ambos casos el proceso de licitación incluye trabajos que la conselleria no puede ofrecer de forma directa como el mantenimiento de edificios, el de aparatos médicos y quirúrgicos, los servicios de cafetería y comidas, de seguridad, de limpieza, de lavandería o de gestión de residuos tóxicos.

Sanidad inicia el proceso de reversión del área de salud de Dénia

Según han apuntado desde EFE citando fuentes oficiales, el publicar este anuncio previo "es voluntario de la administración, no necesario", y el objetivo es que si finalmente se decide que ambos departamentos pasen a la gestión directa acortará y agilizará los plazos para la presentación de ofertas, ya que permitiría bajar de 35 a 15 días para presentar ofertas, así como otros trámites. Cabe recordar que el tiempo es clave y apremia, puesto que el contrato de Dénia con Ribera Salud para gestionar el hospital y los centros de salud de la zona expira el próximo 1 de febrero de 2024 después de 15 años. En el caso de Manises, hay algo más de margen: la fecha tope es el 7 de mayo de 2024.

En todo caso, fuentes oficiales han insistido a EFE que todas las opciones "siguen abiertas" y que no se trata de una licitación definitiva, sino de "un paso más" que "agilizaría los plazos" en caso de que finalmente siguiera adelante la reversión de ambos departamentos a la gestión directa.

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Pendientes de una auditoría

Según ha anunciado varias veces el conseller, la decisión depende de una auditoría sobre el estado y el funcionamiento de estos departamentos de salud que estaría llevando a cabo la propia administración. En un principio, Gómez contempló tenerla acabada para septiembre pero este estudio se ha retrasado, de ahí que la conselleria vaya "haciendo camino" conscientes de que las dos opciones están sobre la mesa. O se revierten a la gestión pública las dos áreas de salud (tal como previó el Botànic) o se confía de nuevo en la gestión privada, aunque con una prórroga máxima de un año "revisable".

Compromís pide confirmar la reversión

Tras conocer el nuevo paso dado por la conselleria, el diputado de Compromís y portavoz de Sanidad en les Corts, Carles Esteve ha pedido a la administración que "opte directamente" por la reversión manteniendo la decisión del Consell anterior. Para Esteve, "no hay ningún dato relativo a la atención sanitaria, a las inversiones en centros de salud y equipaciones ni a las condiciones laborales del personal sanitario que justifique continuar con este modelo de gestión", de ahí que pidiera que se abandonara la idea de la prórroga. Para el diputado de Compromís, dar el paso del anuncio previo de la licitación sin apostar decididamente por la reversión suponía, además, generar "inseguridad" en las empresas e incertidumbre en la población y los profesionales sanitarios.

"Reiterar que todas las opciones siguen abiertas en cuanto a la reversión (...) después de anunciar estas licitaciones es crear una inseguridad jurídica en el sector de los servicios sanitarios que no se puede permitir. Estas licitaciones de servicios (...) se hacen interpelando a unas empresas a las cuales no se les está generando ninguna seguridad ni ninguna certeza, porque todavía no saben si estos departamentos serán de gestión pública o no", añadía Esteve.