El impacto de la demencia se doblará en 20 años y afectará a 200.000 valencianos

El estudio, que nace con el nombre 'Desafío de Valencia', arranca con la búsqueda de 9.000 voluntarios mayores de 18 años. 

El proyecto aspira a diseñar estrategias de prevención de las enfermedades discapacitantes de origen cerebral

El vicerrector de Investigación de la UCV, José María Tormos, con la tecnología que utilizarán para los chequeos cerebrales.

El vicerrector de Investigación de la UCV, José María Tormos, con la tecnología que utilizarán para los chequeos cerebrales. / Miguel Angel Montesinos

Rafel Montaner

Rafel Montaner

La Universidad Católica de València (UCV) ha presentado un proyecto de investigación pionero a nivel mundial sobre la mejora de la salud cerebral y la optimización de la capacidad de resiliencia del cerebro frente a enfermedades neurológicas y psiquiátricas. El estudio, que nace con el nombre 'Desafío de Valencia', arranca mismo con la búsqueda de 9.000 voluntarios y voluntarias mayores de 18 años.

El proyecto aspira a diseñar estrategias de prevención de las enfermedades discapacitantes de origen cerebral a partir del análisis colaborativo, mediante tecnología Big Data e Inteligencia Artificial (IA), de los datos extraídos del significante volumen de población que participará en el estudio. Para ello se caracterizará la influencia de los estilos de vida en la salud cerebral y se construirá un biobanco, a través de pruebas genéticas y resonancias cerebrales, de grupos de edad de población con o sin síntomas de haber desarrollado enfermedades psiquiátricas y neurológicas con el fin de establecer indicadores de riesgo de salud cerebral.

Esta iniciativa responde a un doble compromiso con la sociedad valenciana: por un lado, mantener la capacidad funcional óptima del cerebro en cada persona a lo largo de su vida y prevenir problemas cognitivos, identificando los posibles factores de riesgo de manera temprana; así como promover la resiliencia cerebral para minimizar sus daños en pacientes con patologías neurológicas y psiquiátricas.    

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 5 de las 10 enfermedades con mayor repercusión global son enfermedades cerebrales que generan un alto grado de discapacidad. Se estima que una de cada tres personas sufre algún tipo de trastorno neurológico: más de 15 millones en España y más de un millón y medio en la Comunitat Valenciana.

Las demencias, y entre ellas la enfermedad de alzhéimer (60 % de los casos), constituye el problema con mayor impacto de entre todas las enfermedades neurológicas. El número de personas afectadas en España supera las 700.000 entre los mayores de 40 años. En 2050, este número se habrá duplicado y se acercará a los dos millones de personas (200.000 en la Comunitat Valenciana).  

El 'Desafío de València'

Pascual-Leone, en el centro, y a su lado José María Tormos, durante la presentación del proyecto de la UCV.

Pascual-Leone, en el centro, y a su lado José María Tormos, durante la presentación del proyecto de la UCV. / Miguel Angel Montesinos

El 'Desafío de Valencia' cuenta con el asesoramiento científico del neurólogo valenciano Álvaro Pascual-Leone, catedrático de Neurología de la Universidad de Harvard y un referente mundial en salud cerebral, y está dirigido por el vicerrector de Investigación de la UCV y médico especialista en rehabilitación neurológica, José María Tormos, quien antes de incorporarse a la Universidad del Arzobispado de València el curso pasado fue durante casi 20 años director de investigación del Institut Guttman, Instituto Universitario de Neurorehabilitación adscrito a la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB).

"Añadir vida a los años, no años a la vida"

Pascual-Leone ha explicado durante la presentación del proyecto que tras el aumento espectacular de la esperanza de vida en los países desarrollados que "añadir años a la vida, no necesariamente quiere decir que añadamos vida a los años, pues de cada 12 meses en los que se incrementa la esperanza de vida al nacer al menos 9 son de discapacidad originada principalmente por enfermedades cerebrales".

Según el catedrático de la Escuela Médica de Harvard, las enfermedades cerebrales discapacitantes "tienen un alto coste económico, aproximadamente el 15 % del PIB mundial que en su mayoría soportan las familias, y también emocional". "Asociamos la demencia a una enfermedad de las personas mayores sin tener en cuenta que sus síntomas empiezan mucho antes y, por tanto, se puede reducir su impacto mediante chequeos de la función cerebral que nos permitan detectar a tiempo las enfermedades cerebrales o incluso prevenirla mediante la introducción de estilos de vida que aumenten la resiliencia del cerebro ante las enfermedades neurológicas y psiquiátricas".

Así, recalca que "de cada cinco personas mayores de 65 años que padecen alzhéimer, una no manifiesta síntomas y otras dos tienen trastornos cognitivos leves que no merman su capacidad de manejarse en el día a día, porque la reserva cognitiva de su cerebro y su resiliencia a las enfermedades neurológicas y psiquiátricas es muy alta". Por ello, aboga por implantar programas de mejora de esa salud cerebral que puede hacer nuestro cerebro más resistente ante el alzhéimer y otras enfermedades cerebrales.

El catedrático de neurología de Harvard, Álvaro Pascual-Leone, durante la presentación del proyecto de la UCV.

El catedrático de neurología de Harvard, Álvaro Pascual-Leone, durante la presentación del proyecto de la UCV. / Miguel Angel Montesinos

En este sentido, el doctor Tormos, recalca que "en temas de enfermedades cerebrales desgraciadamente estamos actuando demasiado tarde, perdiendo la oportunidad de prevenirlas y de anticiparse a ellas mediante programas de mejora de la salud cerebral y de la optimización de la resiliencia o resistencia del cerebro ante las mismas". Por ello, añade, que mantener la funcionalidad del sistema nervioso es la prioridad de la investigación biomédica en el siglo XXI. "Hasta la fecha, la aproximación tradicional en medicina a estas patologías se ha centrado en buscar el diagnóstico precoz de la enfermedad. Sin embargo, el daño estructural antecede en más de una década a la aparición de los síntomas en la mayor parte de enfermedades cerebrales, por lo que resulta necesario realizar un cambio de estrategia para identificar marcadores biológicos de salud que permitan diseñar nuevas estrategias de intervención". 

El primer reto de este proyecto es establecer indicadores de salud y resiliencia cerebral con el fin de identificar nuevas dianas terapéuticas y diseñar programas de estilos de vida que mejoren la resistencia del cerebro frente a enfermedades neurológicas y psiquiátricas, así como medir el impacto de estos cambios de hábitos en la salud cerebral a través de la monitorización de los mismos.

Tener un propósito de vida y no sentirse solo

En esta línea, el profesor Pascual-Leone, destaca que introducir mejoras en nuestra nutrición, la práctica de ejercicio de forma regular, el sueño, el descanso, la relajación y la meditación, así como la socialización, la actividad cognitiva y el tener un plan de vida, "pueden aumentar en un 80 % la resiliencia de nuestro cerebro y, por tanto, reducir el riesgo de sufrir enfermedades cerebrales discapacitantes".

De todos estos factores, apunta el catedrático, "sin duda los más importantes, pues median en beneficio de los otros, es tener un propósito de vida bien definido, el saber por qué te levantas cada día de la cama por la mañana, así como el no sentirse solo, el disfrutar de una vivencia social de apoyo".

Ciencia abierta a los valencianos

El 'Desafío de València' que propone la Universidad Católica no es solo un proyecto de investigación, ya que también apuesta desde el minuto cero por la innovación clínica y la formación sobre salud y resiliencia cerebral. Para ello se ha formado un grupo de investigación centralizado en la UCV, pero bajo un concepto de ciencia abierta, es decir, invitando a participar a otras universidades, instituciones y fundaciones tanto valencianas como españolas y también internacionales.  

El vicerrector de Investigación de la UCV y doctor especialista en rehabilitación neurológica, Jose Maria Tormos.

El vicerrector de Investigación de la UCV y doctor especialista en rehabilitación neurológica, Jose Maria Tormos. / Miguel Angel Montesinos

En un primer momento, se recabarán datos en tres cohortes poblacionales representativas que sumarán más de 9.000 participantes: personas sanas, para estudiar marcadores biológicos y comportamentales relacionados con la salud cerebral; pacientes con enfermedades neurológicas y psiquiátricas, para caracterizar componentes individuales relacionados con mecanismos de resiliencia e identificar nuevas dianas terapéuticas; y jóvenes, para estudiar el impacto de los estilos de vida sobre la salud cerebral a corto y largo plazo.   

Promoción de estilos de vida saludables

Desde el primer momento, se ha querido trasladar este desafío a la clínica, por lo que las Clínicas UCV ya cuentan con una Unidad de Salud Cerebral donde aplican los descubrimientos habidos hasta la fecha. Para ello, se emplea la tecnología más puntera, desde un tratamiento multidisciplinar que abarca la medicina, la fisioterapia, la psicología, la nutrición, la actividad física y el deporte y la terapia ocupacional. La atención personalizada incluye la asistencia y el apoyo continuos a la familia y a los cuidadores.    

Así, el programa de estimulación cerebral no invasiva está dirigido a personas que han sufrido un ictus, padecen alzhéimer o párkinson, entre otras patologías, reduciendo el impacto de la discapacidad que les pudieran ocasionar.  

Por otro lado, el programa de promoción de estilos de vida saludables se ofrece a personas sanas de cualquier edad que quieren cuidar su memoria, optimizar sus funciones cognitivas y mantener su equilibrio emocional para poder lograr sus metas y propósitos vitales. Es por ello que ayuda a cada individuo a definir prescripciones personalizadas que pueden incluir la actividad física, la nutrición, el sueño, el ocio y la actividad social.  

Finalmente, la proyección académica se plasma en el Máster de Salud Cerebral que comenzará a impartir en enero la UCV, centrado en técnicas y estrategias de rehabilitación neuropsicológica, estimulación y entrenamiento cognitivo, técnicas avanzadas de neuromodulación para su aplicación en investigación y en entornos terapéuticos, además de formación específica en motivación. El nuevo título está dirigido a graduados en Psicología, Medicina, Trabajo Social, Terapia Ocupacional y Fisioterapia.