La Audiencia absuelve a Rus, Benavent y su exsuegro por la adjudicación del centro de llamadas de Imelsa

Estaban acusados de los delitos de prevaricación, malversación, tráfico de influencias, blanqueo de capitales y falsedad en documento oficial y mercantil que la sección quinta de la Audiencia de València no ve acreditados

Los acusados en la pieza del call center de Imelsa.

Los acusados en la pieza del call center de Imelsa. / Miguel Ángel Montesinos

La sección quinta de la Audiencia ha absuelto a los siete acusados de amañar el contrato del "call center" o centro de llamadas de Imelsa, según confirman a Levante-EMV fuentes de las defensas y ha informado el TSJCV. Los siete acusados por el presunto amaño del centro de llamadas tributario o «call center» de Imelsa se enfrentaban a penas de prisión que oscilaban entre los tres y los ocho años de cárcel. Los siete acusados absueltos son el expresidente de la Diputación de Valencia y exalcalde de Xàtiva, Alfonso Rus, el exgerente de Imelsa y yonqui del dinero Marcos Benavent, su exsuegro y empresario de Xàtiva Mariano López, junto a su mujer y su cuñada, además de los funcionarios de la Diputación de Valencia Salvador Deusa y Ricardo de Ángel Marí.

Las siete personas juzgadas estaban acusadas de los delitos de prevaricación administrativamalversación de caudales públicos, tráfico de influencias, blanqueo de capitales y falsedad en documento oficial y mercantil por adjudicar el «call center» en 2013 por 842.975,2 euros, a razón de 24.793,38 euros mensuales (ambas cantidades sin IVA). 

La privatización de este servicio, bautizado como “call center” y adjudicado a la empresa Servimun el 20 de mayo de 2013, se justificó desde todas las instancias de la institución provincial, entonces dirigida por Alfonso Rus, como una manera de mejorar el servicio de atención telefónica tributaria a los contribuyentes. La Fiscalía Anticorrupción consideraba que proceso para la adjudicación estuvo amañado para que la empresa Servimun ganara el concurso por la amistad que existía entre un funcionario de la Diputación de Valencia investigado en estas causa y responsable del contrato, Salvador Deusa, y Mariano López, ex suegro de Marcos Benavent. Extremos que no aceptan los magistrados de la sección quinta de la Audiencia de València que absuelven a los siete acusados por el presunto amaño de este contrato.

Respecto al delito de prevaricación, los magistrados señalan que "el nombre de Alfonso Rus Terol apenas aparece en el relato de hechos probados de esta sentencia. Y no aparece porque difícilmente pudo ser él, el autor, ni intelectual ni material, del delito de prevaricación administrativa. Quedó probado que no fue el autor de la idea (lo fue el testigo Haro)", recuerda en referencia al diputado responsable de Hacienda, José María Haro.

Sobre el contrato concluye que "la adjudicación del contrato a Servimun SLU siguió todos los pasos procedimentales para un contrato de esa naturaleza de cuantía superior a los 150.000€, que tiene prevista la Ley de Contratos del Sector Público". Por lo que respecto a los acusados por estos hecho señala: "Alfonso Rus Terol tuvo, en el inicio del proceso, la misma intervención que pudo haber tenido cualquier otro diputado: Su voto favorable a la ampliación de la encomienda de gestión vigente en ese momento; Marcos Benavent Vicedo apenas tuvo intervención, si tuvo alguna en esa fase". Y concluye que "lo mismo cabe decir del acusado Mariano López Sancho respecto al cual no se ha podido probar nada que revele que él pudo intermediar para obtener para él o para Servimun SLU la adjudicación del contrato".

Los magistrados tampoco ven probados los delitos de malversación y tráfico de influencias. "No ha habido prueba alguna que permita concluir que Alfonso Rus hubiera ejercido alguna clase de presión para obtener una resolución (cualquiera de las que abarcó el procedimiento de contratación), gracias a la cual, él o un tercero, se beneficiara".

La pieza separada del caso Taula del call center es la tercera que se juzga, con resultado favorable para los acusados. La primera en juzgarse y conocerse fue la de Thematica Events en la que la mayoría de los acusados resultó condenado. Y está pendiente que se conozca el fallo de la pieza de los trabajadores zombis en Ciegsa e Imelsa, que juzgó la sección segunda de la Audiencia de València.