Los presupuestos incluyen un déficit que triplica el previsto por el Gobierno ante la UE

El Consell se ha acogido a un resquicio legal para incluir en sus presupuestos del próximo año un déficit del 0,3 % del PIB pese a que el plan presupuestario que remitió recientemente el Gobierno central a Bruselas lo fija en el 0,1 % para 2024. El desvío del 0,3 % entre ingresos y gastos era la tasa de referencia para este 2023. Para el próximo, el Ejecutivo dio algo de oxígeno a los territorios y lo dejó en el 0,1 % en el plan que envió a la UE pese a que se esperaba una exigencia de equilibrio.

Pero esa senda fiscal a la que se ha comprometido ante Bruselas debe ser oficializada en los Presupuestos Generales del Estado, que al estar el Ejecutivo en funciones iniciarán el año prorrogados, por lo que legalmente la tasa de déficit de las autonomías sigue siendo ahora mismo del 0,3 %. De hecho, la Airef ya instó al Gobierno a, en ausencia de objetivos firmes, pactar con los territorios esas tasa de referencia para evitar este recoveco legal.

La Generalitat reduce su déficit en 500 millones en la primera mitad de 2023

El Consell también pidió datos al Gobierno y asegura no haber recibido respuesta ni de las reglas de gasto previstas ni tampoco de las entregas a cuenta y liquidación del sistema de financiación, donde se han valido de la previsión de la autoridad fiscal. Así, ha optado por mantener ese desvío de sus cuentas, como también han hecho Murcia o Cataluña. La jugada permite a la Generalitat engordar sus presupuestos en unos 290 millones de euros al estirar esa capacidad de gasto en dos décimas (del 0,1 al 0,3 %).

Más de 1.600 millones sin garantizar

No es la única maniobra a la que ha recurrido el Consell para cuadrar unas cuentas complejas. PP y Vox han renunciado a mantener la partida reivindicativa de 1.300 millones por la infrafinanciación que creó el Botànic, pero aun así han incluido varias partidas cuyo cobro no está ni mucho menos garantizado.

Es lo que sucede con los 926 millones que se incluyen en el apartado de ingresos a cuenta del dinero que adeuda el Estado por la atención sanitaria a desplazados o los 463 millones que se reclaman como «compensación» de las rebajas del IVA y de la luz aprobadas por el Gobierno central y que, según el Consell, rebajaron en esa cantidad la recaudación autonómica.En total, las tres partidas suman 1.667,5 millones no contemplados por el Ejecutivo. 

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