Cierra la tienda decana de electrodomésticos en Xàtiva tras 70 años de vida

Los hermanos Esparza bajarán la persiana del negocio de República Argentina el 30 de junio como consecuencia de su jubilación y la falta de relevo

Su padre inició la actividad en los años 50 en la plaça de la Bassa con la reparación y fabricación de radios

José Luis y Miguel Esparza, en la tienda de electrodomésticos.

José Luis y Miguel Esparza, en la tienda de electrodomésticos. / Perales Iborra

Sergio Gómez

Sergio Gómez

Pocos negocios familiares de Xàtiva pueden presumir de haber resistido tanto tiempo al pie del cañón de manera ininterrumpida. Durante más de medio siglo, los Esparza han equipado de electrodomésticos las casas de multitud de vecinos de la capital de la Costera y de los municipios vecinos.

Su tienda, emplazada en la planta baja de un bloque de viviendas que recae a la Avenida República Argentina y la calle Padre Claret, representa todo un icono comercial de referencia en la ciudad por su longevidad y por la enorme cartera de clientes satisfechos que ha atesorado con el paso de los años, de la mano de la marca Milar, como lo demuestran las decenas de reseñas positivas que valoran sobre todo la atención recibida.

Pero el establecimiento tiene los días contados. Su cierre definitivo es inminente como consecuencia de la jubilación de los dos hermanos que lo regentan, José Luis y Miguel Esparza. Como muchos otros comercios tradicionales de proximidad, la falta de relevo generacional no deja otra alternativa.

El origen del negocio se remonta a la década de 1950, cuando José Ramón Esparza (padre de los actuales responsables) comenzó reparando y fabricando equipos radiofónicos en un local de la Plaça de la Bassa. Fue un pionero que creaba sus propios electrodomésticos.

La empresa se fue adaptando a los tiempos y consiguió expandirse conforme se fue democratizando el uso de novedosos aparatos domésticos y electrónicos. Pronto llegaron los frigoríficos, el equipamiento de cocinas y las televisiones, a partir de los años 60.

Cartel de liquidación por jubilación en la tienda de electrodomésticos Esparza.

Cartel de liquidación por jubilación en la tienda de electrodomésticos Esparza. / Perales Iborra

Fue en dicha década cuando los Esparza ocuparon el bajo de República Argentina, que en un principio se utilizaba como almacén y exposición, mientras que la tienda se mantenía en la Bassa. Con posterioridad, todo se centralizó en la misma ubicación.

La actividad del comercio se orientó a la venta y reparación de toda clase de aparatos electrodomésticos, de imagen y sonido, incluyendo equipos informáticos, sistemas de calefacción, aire acondicionado y otros aparatos de uso doméstico.

Ahora, el establecimiento se encuentra inmerso en un proceso de liquidación de todo su stock, con descuentos de hasta el 30 %. La idea de los Esparza es bajar la persiana para no volver a abrirla el próximo 30 de junio, de aquí a un mes. "Así nos evitamos el calor del verano", bromea José Luis, que lleva desde 1985 en la dirección y administración del local.

Si algunos productos se quedan sin vender se trasladarán a la tienda que el grupo Milar tiene en el Centro Comercial Plaza Mayor, donde serán derivados los clientes habituales de la tienda que quieran hacer uso de las garantías y el servicio técnico de sus productos, en virtud de un acuerdo de colaboración.

Aunque trabajo no les falta, y de hecho los hermanos van hasta arriba de encargos antes de rematar su vida laboral -ayer costó poder dar con ellos en el establecimiento para fotografiarles-, José Luis deja claro que la decisión del cierre está más que meditada y es "inamovible".

El proceso de liquidación del negocio va viento en popa: lo primero que han desaparecido han sido los televisores, y el interior se nota más vacío que de costumbre, a raíz del llamamiento de los carteles colocados en los escaparates que anuncian la "liquidación por jubilación".

La madre de los Esparza, María Gironés García, celebró recientemente los 100 años en Xàtiva.

Goteo de cierre de comercios tradicionales

La desaparición de la tienda de electrodomésticos se suma a un goteo incesante de comercios tradicionales de la ciudad que se encuentran en liquidación por cierre con varias décadas de historia a sus espaldas. Es el caso de la popular tienda de ropa Paco García en la Albereda, cuyo propietario se jubila tras casi medio siglo de actividad (el local va a dejar paso a un banco), el establecimiento «Mari Luz», una de las tiendas de referencia en el sector de los trajes de boda en la ciudad que cerrará el 31 de diciembre tras 50 años en funcionamiento en pleno corazón del casco antiguo o la Ferretería Blesa, que tampoco llegará a 2025 tal como se conoce hasta ahora porque la familia que lo ha regentado deja el negocio y quiere traspasarlo.