Catarroja reconstruye su pasado blasquista

 Los testimonios orales durante las visitas a la bandera apuntan a que el pintor fue Alberto Gradolí

También se ha descubierto que la desaparecida Casa de la Democracia estaba situada en la calle Mayor  

Foto antigua recuperada de un grupo de hombrse, entre ellos el alcalde de Catarroja, con la bandera blasquista.

Foto antigua recuperada de un grupo de hombrse, entre ellos el alcalde de Catarroja, con la bandera blasquista. / A.C.

Pilar Olaya

Pilar Olaya

 Catarroja ha culminado con un éxito impredecible las visitas guiadas a la bandera blasquista, rescatada por el consistorio tras estar escondida durante 90 años por la familia del alcalde que ordenó realizarla para conmemorar la llegada de los restos a València del escritor valenciano. Más de 200 personas han podido ver el emblema expuesto en el antiguo despacho de alcaldía, en las ocho visitas guiadas por Tono Vizcaíno, licenciado en Historia y doctor en Arqueología por la Universitat de València.

Sin embargo, esas visitas han sido más productivas de lo esperado, puesto que muchas de las personas que han acudido han aportado información hasta ahora desconocida tanto sobre el autor de la pintura de la bandera como de la Casa Democracia, que se menciona en ella.

De la bandera, con el rostro de Blasco Ibáñez sobre los colores republicanos, se sabía que fue mandada a realizar por el exalcalde catarrogí Fernando Ribes en 1933, para conmemorar la llegada a València de los restos del escritor valenciano, que había muerto en Francia cinco años antes. Se trata de una tela de dimensiones considerables, de 2’56 m x 1’57 m, y solo se sabía que había sido pintada a mano por A. Gradolí, cuya firma aparece, con los colores de la bandera republicana y el retrato de Blasco Ibáñez. También aparece la fecha 29 de octubre en 1933 y la inscripción "Casa de la Democracia".

El esudo pintado con el rostro de Blasco Ibáñez y las inscripción Casa de la democracia Catarroja.

El esudo pintado con el rostro de Blasco Ibáñez y las inscripción Casa de la democracia Catarroja. / A:C.

Pues en una de esas visitas, según relata Tono Vizcaíno, una mujer aseguraba que ella había tenido un tío que se llamaba Alberto Gradolí, que vivió en esa época y que se dedicaba a pintar telas, premisa que en la actualidad está siendo investigada por el propio Vizcaíno y que tiene bastantes visos de ser cierta.

De la misma manera, otra mujer llevó a Tono Vizcaíno a entrevistarse con otra anciana de más de 90 años, que asegura que recuerda haber visto la Casa de la Democracia situada en la antigua Calle Mayor, ahora Calle Cervantes. “La mujer nos hablaba de un casino. Es bastante probable que cuando se instaurara la dictadura, el nombre de Casa de la Democracia desapareciera, y pasase a denominarse casino. Son espacios donde se socializaba, y se transmitía ideales blasquistas de aquella época. Este testimonio es de gran valor, porque esta casa se demolió y actualmente está ocupada porun supermercado”, señala el historiador.

Una de las visitas guiadas por el historiador Tono Vizcaíno.

Una de las visitas guiadas por el historiador Tono Vizcaíno. / A.C.

Durante las visitas, no solo se pudo descubrir el posible nombre del pintor y la ubicación de la Casa de la Democracia, también muchos de los asistentes aseguraban que sus antecesores mayores les habían contado que acudieron a la procesión cívica que se hizo para recibir los restos de Blasco Ibáñez. También, ha aparecido una fotografía, donde se puede ver a un grupo de hombres junto a la bandera de Catarroja probablemente en la procesión, entre los que se encuentra le alcalde de entonces que ordenó su creación, Fernando Ribes, y posiblemente su hermano. “También hemos sabido que esta bandera también fue utilizada por dicho alcalde para un bautizo familiar”, explica Tono Vizcaíno.

Todos estas hallazgos han impulsado tanto a Vizcaíno como a otros colectivos del pueblo, así como historiadores locales, a comenzar una investigación para indagar más sobre el pasado republicano y blasquista de Catarroja, que el pintor estaba muy vinculado con esta ciudad de l’Horta.

El gran éxito de estas visitas guiadas ha sido “rescatar del olvido la memoria de esta época republicana que había estado escondida, al igual que la bandera"

Para Tono, el gran éxito de estas visitas guiadas impulsadas por el consistorio de Catarroja tanto a la bandera blasquista como al salón de plenos del antiguo ayuntamiento ha sido “rescatar del olvido la memoria de esta época republicana que había estado escondida, al igual que la bandera , porque estaba prohibido. Personalmente estoy muy satisfecho porque mi explicación del primer día varió mucho de la que hice el último apenas tres meses después. Ya que ha sido enriquecida gracias a los testimonios orales de los asistentes”, confiesa. 

Más visitas

El éxito de las visitas, no solo de asistencia sino también a nivel de investigación, ha hecho que el consistorio decida retomar esta ruta patrimonial en otoño, aunque hasta ese momento, el ayuntamiento también contempla autorizar visitas concertadas a colectivos o centros escolares. Además, debido a que se cumple 90 años de la llegada de los restos de Blasco Ibáñez a Valencia, el Ayuntamiento de Catarroja tiene previsto comunicarse con la Fundación Blasco Ibáñez para poner a su disposición la bandera para exposiciones u otros actos previstos.

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