Los bomberos extinguen un incendio en los terrenos militares de Bonrepòs i Mirambell

Los bomberos de Moncada del Consorcio Provincial de Valencia intervinieron ayer por la tarde en un incendio que se originó en los terrenos militares situados en Bonrepòs i Mirambell, en l'Horta Nord. Los cuerpos de extinción se personaron en el lugar, que en estos momentos no alberga ninguna actividad, sobre las seis de la tarde. El origen de las llamas apunta a una palmera cercana que quedó totalmente calcinada y habría extendido el incendio a parte de la estructura. Con todo, los bomberos que actuaron consiguieron extinguir las llamas esa misma tarde.

La alcaldesa del municipio, Raquel Ramiro, ha apuntado que aunque desconoce el por qué se origió el fuego, señala a un posible petardo que se hubiera quedado encajado en lo alto de la palmera, como ocurrió, también, durante la Crida de las Fallas de València recientemente. "Fue un incendio que estuvo, en todo momento, muy controlado pues si hubiera sido de otra manera, con tanta hierba seca podría haber sido mucho peor", señala la primera edila a este diario.

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La historia de los terrenos

Estos terrenos tienen una historia que viene de lejos. La zona era una de las dependencias militares, situada en un punto que linda por un lateral con la carretera de Barcelona y por el otro con el Barranc del Carraixet, acogieron hasta 1998 el Parque y Talleres de la III Región Militar de Levante. 

Cuando cerró el cuartel, el Ministerio de Defensa quisó vender el suelo pero las 15 familias a las que se les habían expropiado las parcelas durante el franquismo exigieron que se les devolviesen. El asunto llegó hasta Tribunal Supremo que en 2003 obligó al Gobierno a devolver los más de 70.000 metros de suelo a sus primeros propietarios al quedar demostrado que la compraventa se había realizado sin el consentimiento de estos.

La pretensión de las familias era que la calificación de suelo pasase de dotacional militar a residencial, incluso una empresa promotora entregó una señal a los nuevos propietarios por varias de las parcelas, señal con la que estos pagaron parte de los 600.000 euros por los edificios que había levantado Defensa dentro del cuartel y que estaban obligados a comprar. Pero el proceso se fue retrasando y mientras tanto, las instalaciones militares fueron ocupadas por decenas de inmigrantes ilegales causando varios conflictos.

Finalmente en enero de 2013, se procedió al desalojo y al derrumbe de los cuarteles, dejando el solar de casi 70.000 m² en el que se espera dentro de poco poder levantar el nuevo IES además de una zona residencial.