La historia sobrevive al incendio de la Vall d'Ebo, que sí destruye los petroglifos de los Masos de Capaimona

Se han salvado santuarios rupestres como el de Pla de Petracos, los despoblados moriscos o los castillos islámicos de Benirrama y Benissili. El fuego llegó a estos monumentos pero no los dañó. La conselleria "radiografía" con un dron el patrimonio de las 12.250 hectáreas que ardieron

El nevero de Dalt, intacto pese a estar rodeado de pinos carbonizados

El nevero de Dalt, intacto pese a estar rodeado de pinos carbonizados / Levante-EMV

Alfons Padilla

Alfons Padilla

La historia se salvó del fuego. Las 12.250 hectáreas de las montañas de la Marina Alta y el Comtat que ardieron el pasado mes de agosto tras caer un rayo en la Vall d'Ebo son pura historia. Hay santuarios de pinturas rupestres (el más conocido es el de Pla de Petracos), así como castillos islámicos como los de Benirrama y Benissili, en la Vall de Gallinera o los despoblados moriscos de la Vall d'Alcalà o neveros. En total, en las montañas calcinadas se localizan 56 abrigos de arte rupestre, bienes de interés cultural (BIC) o bienes de relevancia local (BRL). Es un inmenso patrimonio. El fuego entró en los castillos y amenazó el arte prehistórico. No ha causado daños. Pero hay una excepción. Las llamas sí han destruido los grabados (petroglifos) de los Masos de Capaimona, una alquería islámica situada en el término municipal de Tollos.

Ladera calcinada del castillo de Benissili, en la Vall de Gallinera

Ladera calcinada del castillo de Benissili, en la Vall de Gallinera / A. P. F.

La consellera de Cultura, Raquel Tamarit, ha presentado esta mañana los resultados del proyecto Fènix (nombre que remite a eso de resurgir de las cenizas). Ha consistido en "radiografiar" desde el aire con drones la posible afección al patrimonio de los colosales incendios de la Vall d'Ebo y Bejís. El dron ha alzado el vuelo y se ha dirigido al castillo de Benirrama, que corona un crestón que está en la entrada a la Vall de Gallinera. El fuego entró en la fortaleza, al igual que lo hizo en el otro castillo de Al-Azraq de la Gallinera, el de Benissili (en la salida del valle hacia el Comtat). No borró la historia. Los castillos (sus ruinas) son de poderosa piedra.

Raquel Tamarit y otros responsables de la conselleria observan cómo se eleva el dron

Raquel Tamarit y otros responsables de la conselleria observan cómo se eleva el dron / A. P. F.

Los grabados históricos de Capaimona (no son prehistóricos) no se salvaron. La acción del fuego y el gran contraste de temperaturas provocaron que la roca se descascarillara. Es una pérdida importante, pero por la virulencia del incendio y la tremenda superficie que arrasó casi resulta milagroso que no borrase del mapa otros destacados vestigios prehistóricos e históricos.

"El verano pasado los incendios se llevaron una parte importante de nuestro patrimonio natural y medioambiental, con consecuencias muy serias para toda la gente que vive en los pueblos, y hay que continuar estando a su lado”, ha subrayado la consellera, que ha recalcado que esta geografía "atesora un excepcional patrimonio cultural". “El proyecto Fènix nos facilitará mucho hacer un testeo más cuidadoso del impacto de los incendios en elementos patrimoniales inventariados, en muchos casos con relevancia de BIC o BRL. Muchos de estos son de difícil acceso. El uso de drones será muy efectivo. Pero no solo eso, también nos permitirá detectar e inventariar nuevos elementos que estaban ocultos entre la vegetación, como construcciones en piedra en seco o trincheras de la Guerra Civil”.

A la consellera la han acompañado, el alcalde de la Vall de Gallinera, Ignasi Mora, o el jefe del servicio de la dirección territorial de Cultura de Alicante, José Antonio López Mira, entre otros.

En la superficie del incendio de la Vall d'Ebo, han salido a la luz corrales de piedra en seco que no estaban inventariados. Además, ahora se harán más inspecciones sobre el terreno. Tras el incendio de la Vall d'Ebo de 2016, ya se descubrieron nuevas pinturas rupestres en el Barranc de la Canal de Pego.

Ahora también el Ayuntamiento de la Vall de Gallinera va a llevar a cabo un proyecto de rehabilitación y de mejora del acceso del castillo de Benissili. Lo ha anunciado hoy el alcalde, Ignasi Mora. La conselleria de Cultura ya ha dado su visto bueno a subvencionar estos trabajos.