"Estamos haciendo números de campeón, ¿por qué no soñar?"

El Atlético Saguntino sigue de dulce y esta semana espera sellar matemáticamente la permanencia para mirar hacia arriba

Celebración rojilla tras el último triunfo a domicilio.

Celebración rojilla tras el último triunfo a domicilio. / Atlético Saguntino

Pepa Conesa

"Hemos superado las expectativas que teníamos". Así resume Sergi Escobar, entrenador del Atlético Saguntino, la trayectoria del equipo desde su llegada al banquillo, que le ha llevado de estar a cuatro puntos de la salvación a solo tres del play off de ascenso a Primera RFEF con siete victorias, tres empates y una derrota en dos meses y medio, los mejores números de la categoría en este lapso.

El técnico añade que "ahora estamos ocho puntos por encima del descenso. Estamos haciendo números de campeón y ¿por qué no soñar con la quinta plaza, sabiendo que es muy difícil?". Escobar reconoce que "estamos muy satisfechos con el compromiso de todos los jugadores. Esperamos esta semana certificar la permanencia y así poder disfrutar las tres últimas jornadas sin presión". La última victoria para llegar a esta situación se la anotaron en su visita del CD Ebro (0-1), con tanto de Ketu tras un saque de esquina servido por Juanma Acevedo. 

El encuentro frente al colista, que certificó su descenso tras la derrota, arrancó con poca intensidad y escasas ocasiones, más allá de un remate de Nacho Ramón a centro de Javi Pérez. Tras el paso por los vestuarios, la dinámica se mantuvo hasta el minuto 8, cuando un jugador aragonés vio la roja directa. Poco después llegó el tanto de Kalvin Ketu, que puso en ventaja a las saguntinistas quienes, por medio de Luis Navarro, estuvieron a punto de sentenciar en la siguiente acción ofensiva. Chabboura tuvo la última oportunidad de gol para los locales antes del final.

Ritmo lento

Del encuentro, Escobar apunta que "solo puedo estar muy contento y satisfecho. Sabíamos que visitábamos una campo de dimensiones reducidas, que el rival venía de empatar al líder y, a pesar de que casi estaba descendido, era su último cartucho. Ellos impusieron un ritmo muy bajo. No querían correr y buscaban marcar a balón parado. Dentro de esto, las dos acciones más claras del primer tiempo fueron nuestras".

Vuelta de tuerca

Ya en la segunda mitad, "le dimos una vuelta de tuerca a todas las presiones y nos apoderamos del partido. Empezamos a jugar más en campo contrario y supimos aprovechar la superioridad tras su expulsión. Nos pusimos por delante a balón parado, pero no sentenciamos y ellos por poco nos empataron. En líneas generales pudimos tener un resultado más abultado y al final tocó sufrir un poquito", concluye Sergi Escobar.