Protesta en Sagunt contra el envío de armas a la guerra de Yemen

Diez activistas desplegaron una gran pancarta en el Horno Alto

Un momento de la acción.

Un momento de la acción. / Agró-Antimilitaristes

Inma Alpuente

Un grupo de unos diez activistas de Marfull-Agró y Antimilitaristes-MOC València accedieron ayer al interior del Alto Horno nº2 de Sagunt para descolgar una pancarta gigante con una señal de "Stop" en lo alto de este monumento de 64 metros de altura, vestigio de la antigua siderurgia. De esta forma, mostraron su rechazo ante la llegada hoy de otro buque de la naviera estatal saudí Bahri, el Bahri Tabuk, proveniente de Baltimore y otros puertos de los EE UU.

De nuevo, el temor de las organizaciones es que transporte "armamento hacia Arabia Saudí y Emiratos Árabes; "dos países, actores bélicos en la guerra del Yemen y acusados repetidamente de cometer crímenes de guerra por atacar objetivos civiles causando centenares de muertos", apuntan en un comunicado. 

La acción de protesta comenzó sobre las 18,30 horas y los activistas estuvieron en el Horno Alto hasta las 21 horas, aproximadamente, según ha podido saber Levante-EMV, pues entonces fueron desalojados por la Policía Nacional "sin oponer resistencia", después de que agentes locales abrieran el acceso al reciento.

En la pancarta se podía leer "Stop Barcos de la Muerte" y algunos activistas han mostrado pancartas individuales con los lemas "Sagunt x la pau", "Ports tancats a les armes", "La guerra empieza aquí", "No serem còmplices: Desobeïm les guerres" y "Comerç d'armes: Tràfic de mort". Según aseguran, "trabajadores portuarios de Génova, otra frecuente escala de los buques de Bahri, han confirmado repetidas veces con fotos del interior de la bodega de carga de estos barcos la presencia de helicópteros Apache, y todo tipo de blindados, municiones y vehículos fabricados en los EEUU y Canadá.

Estas sospechas que el Bahri Tabuk transporta armamento o material explosivo, a su juicio, "se ven reforzadas por la notificación a la que el grupo de activistas han tenido acceso, emitida recientemente desde la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, de una zona de prohibición temporal extraordinaria de vuelo de drones que abarca todo el Golfo de València y llega hasta las inmediaciones del recinto portuario de Sagunt, precisamente desde la madrugada de lunes 8, que es cuando el buque saudí navegará por esta área".

Los y las activistas tenían la intención de pasar el mayor tiempo posible en la parte superior del monumento para poder observar una posible operación de carga en el buque saudí de armamento procedente de fábricas de armas situadas en territorio español.

Afirman que el Gobierno español continúa autorizando la venta de armamento a Arabia Saudí. "En concreto, se trata de munición de artillería de 155mm, utilizada profusamente por las Fuerzas Armadas saudís para bombardear desde su frontera territorio yemení", afirman.

Tal y como apuntan: "Según las últimas informaciones publicadas por el Ministerio de Industria y Comercio español, el Gobierno autorizó la venta de 26 millones de euros de estos obuses durante el primer semestre de 2022 (el último del que se tienen datos), lo que supone unas 8500 piezas de 43 kg, lo que hace en total 370 toneladas de munición. La única manera económicamente eficiente de transportar esto con destino a Arabia Saudí es en barcos de mercancías en contenedores de 30-40 toneladas, lo que resulta en decenas de estos contenedores que solo han podido ser embarcados en el puerto de Sagunt, porque durante 2022 ningún otro puerto español fue visitado por los buques saudíes. Según estas estimaciones y a pesar del secretismo y la opacidad basados en la Ley de Secretos Oficiales de 1968 que imponen sobre estas operaciones el Gobierno central, la Autoridad Portuaria de València, y la Delegación de Gobierno de la Comunidad Valenciana (que está siempre al corriente de todo tráfico de armamento a través del territorio valenciano), MOC-València y Marfull-Agró consideran posible que el Bahri Tabuk embarque munición de artillería de 155mm fabricada en la factoría de MAXAM-EXPAL en Páramo de Masa (Burgos) en su visita al puerto de Sagunt".

Para ellos: "En esta red de secretismo y complicidades que hacen posible el tráfico de los barcos de la muerte, Marfull y MOC también incluyen a la empresa consignataria, Bergé Marítima, gracias a la cual la naviera saudí Bahri puede operar en puertos españoles". Y añaden: "Bergé ya amenazó al MOC-València con una denuncia por injurias en 2020 por afirmar esta complicidad de la consignataria con el comercio de armas y la guerra del Yemen".

Ante estos datos, las veteranas organizaciones reiteran su deseo de "sacar Sagunt del circuito global del comercio de armas que nutre y hace posible las guerras como la del Yemen: Sagunto por la paz: puertos cerrados a las armas, postura que ha sostenido repetidamente también el consistorio de Sagunt. También señalan el contraste entre los puertos de Sagunt y de Burriana: uno utilizado por los buques traficantes de guerra para alimentar la guerra del Yemen, en la que han muerto decenas de miles de personas durante años, y el otro que acoge barcos de rescate marítimo que han salvado la vida de cientos de personas en el Mediterráneo".

Según afirman, "a pesar de la tregua que se mantiene en el Yemen durante los últimos meses, continúan las enormes compras de armamento por parte de Arabia Saudí y Emiratos: el 50% del armamento saudí proviene de EEUU, y España vende el 25% de su armamento a Arabia Saudí. Según estimaciones de hace un par de años, estos barcos transportan en cada uno de sus 8 viajes anuales una media de 140 millones de euros en armamento desde EEUU, según datos de libre acceso del servicio de aduanas de EEUU y de estadísticas de comercio de la ONU".

Aunque el Gobierno español ha negado a través de varias respuestas a preguntas parlamentarias cualquier posibilidad que las armas españolas puedan ser empleadas con fines ilícitos, las dos entidades recalcan que un informe elaborado en colaboración por varias ONGs europeas, entre las que se encuentra Amnistía Internacional y el Centro Delàs de Estudios por la Pau, ha señalado que entre 2015 y 2021, hubo en el Yemen al menos 577 bombardeos contra civiles o instalaciones que no tenían nada que ver con objetivos militares que mataron a centenares de civiles. Y añaden que "la mayoría de estos ataques se llevaron a cabo con aviones con piezas fabricadas en España o con el apoyo otras aeronaves fabricadas íntegramente en España. Armas de made in Spain, como por ejemplo los lanza cohetes C-90CR y granadas de mano de Instalaza, han sido halladas repetidas veces en el campo de batalla yemení". Por eso, aseguran que "estas armas viajaron probablemente en barcos como el que llega hoy".

Esta acción directa no violenta, que según afirman se llevó a cabo "con absoluto respeto por la integridad del Alto Horno nª2", forma parte de una campaña apoyada por más de 70 organizaciones sociales valencianas (http://bit.ly/puertossinarmas) que Marfull-Agró y MOC-València lanzaron durante los días previos a la visita de otro de los buques de Bahri, el Bahri Abha, en diciembre de 2019, que culminó con una acción directa no violenta en la cual un grupo de seis activistas y un periodista se introdujeron en el recinto portuario, llegando a las inmediaciones de la zona de carga ocupada por el buque saudí, alrededor de las 4 de la madrugada, poco después de su atraque. Los y las activistas fueron interceptados y expulsados del recinto portuario por la puerta principal por unidades de paisano de la Guardia Civil. Cuatro años después, afrontan multas de 500€ impuestas "inesperadamente" por la Autoridad Portuaria de València, afirman respecto a unas sanciones que recurrieron a la sala de lo contencioso administrativo de la Audiencia Provincial de València.

Sagunt, según recuerdan, "es solo una más de las muchas ciudades con puerto donde estos barcos se han encontrado con oposición ciudadana, especialmente fuerte durante 2017 y 2018 en Le Havre, Génova, Marsella, Amberes, Santander y Bilbao".

Desde la Autoridad Portuaria de Valencia han asegurado que el barco saudí, como en casos anteriores, tiene toda la documentación en regla.

Fuentes de la Delegación del Gobierno, por su parte, han confirmado a la agencia Efe que las organizaciones contaban con una autorización para celebrar una manifestación.