Crespones "a cuentagotas" contra el veto a las mujeres en la Semana Santa de Sagunt

La demanda social contra el veto a la participación de las mujeres en la Semana Santa no cesa en Sagunt  y, hoy mismo, se volverá a hacer visible en la concentración convocada por un colectivo a las puertas de la ermita de la Sang, aprovechando la ausencia de actos oficiales.

Sin embargo, un recorrido por el núcleo histórico de la ciudad permite comprobar que aún son minoría los balcones particulares donde la banderola de la Semana Santa va acompañada de un crespón negro, el símbolo impulsado desde hace dos años para denunciar que la Confraria de la Sang se aferre a sus más de cinco siglos de tradición para admitir solo a hombres.

Desde el colectivo que lucha por la entrada de las mujeres en esta entidad se admite que los avances a este nivel se están produciendo "a cuentagotas", pero se resta importancia a esta cuestión y se subraya el creciente apoyo vecinal que están consiguiendo. "Todo lo nuevo cuesta, pero yo creo que no hay muchos crespones porque hemos hecho poca difusión de esa iniciativa", admite haciendo autocrítica una de sus portavoces, Blanca Ribelles. "Lo importante es que la demanda es firme, que el año pasado vino más gente que el anterior a la concentración y que esta vez esperamos ser más", recalca.

Ribelles destaca que esta demanda "no es solo de un grupo de mujeres" y remarca que va más allá del colectivo 'Semana Santa inclusiva', que integra a hombres, tanto cofrades como no cofrades. "Responde a un sentir popular. Cada vez hay más gente que lo apoya", asegura.

Dos votaciones perdidas

La entrada de mujeres en la Sang ha sido votada ya dos veces en la junta general de la cofradía desde 1999. Entonces, varios integrantes defendieron la medida pero, tanto ese año como en 2021, se descartó por mayoría el reformar los estatutos.

Aún así, el gran número de apoyos ganados entre las dos votaciones hace dar por seguro que la reivindicación va a más y próximamente, no se descarta que haya otro grupo de cofrades que plantee de nuevo la medida. «Estamos convencidos de que se volverá a impulsar el debate dentro de la junta y, al final, se dará entrada a las mujeres. Es de justicia que haya un acuerdo así en pleno siglo XXI», decía Ribelles poco antes de la protesta convocada esta tarde a las 19 horas.

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