El aforamiento enreda el juicio a Forés por agredir al hostelero de Llombai

El exalcalde de Llombai, José Forés, sólo podrá ser juzgado por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana al estar aforado por su condición de diputado autonómico. El juzgado de Picassent le ha citado para que comparezca como acusado de un presunto delito de lesiones en la vista oral fijada para el 21 de noviembre, pero en caso de celebrarse ante ese magistrado el juicio debería invalidarse, tal y como ocurrió en el año 2013 con el también diputado del PP Vicent Ferrer, dado que los parlamentarios autonómicos y nacionales gozan del derecho de ser enjuiciados por un tribunal de rango superior al que correspondería a cualquier otro ciudadano. 

Forés fue imputado por la violenta disputa que protagonizó junto al concejal José Luis Climent en un bar de Llombai el pasado 19 de enero. El exalcalde está acusado de propinar golpes al propietario del local, Pedro Llorens, y de darle un mordisco en la mano a su su mujer. La pelea, originada por diferencias ideológicas, fue grabada por la cámara de seguridad del establecimiento. Las imágenes muestran empujones, manotazos, golpes y resbalones causados por la presión ejercida por los tres implicados durante la refriega. La esposa del hostelero y una camarera también salieron perjudicadas cuando trataban de separar a los contendientes. 

El alcalde y el dueño del restaurante se cruzaron después denuncias que han propiciado la convocatoria del juicio «por un delito leve». Tanto el PP como el PSPV han tomado partido por cada uno de los contendientes. El PSPV ha reclamado la dimisión del primer edil «porque quienes ejercen la violencia están inhabilitados para la política» y el Partido Popular mantiene el apoyo al hoy diputado autonómico llombaíno al justificar el intercambio de golpes como una acción de «legítima defensa». El presidente provincial del PP, Vicent Mompó, aseguró ayer en Algemesí que Forés mantendrá en el cargo «hasta que haya una sentencia judicial».

Privilegio ocultado

Entre las perrogativas de los diputados de las Corts Valencianes figura su inmunidad. La ley especifica que los parlamentarios «gozarán de aforamiento en materia de responsabilidad civil por actos cometidos y opiniones emitidas en el ejercicio de su cargo». Ese privilegio se ejerce, según detalla el reglamento, «desde el momento mismo en que el diputado o diputada sea proclamado electo». El aforamiento de los diputados y altos cargos políticos se estableció para «evitar las presiones políticas a las que puede verse sometido un tribunal ordinario cuando juzga a un cargo público de responsabilidad». Los legisladores suponen que un juez de mayor jerarquía es más independiente ante ese tipo de presiones. 

Cuando la dirección del PP incluyó a Forés en la candidatura a las Corts Valencianes ya conocía esa ‘mancha’ en su expediente. De hecho, apenas quince días después de aceptar el acta de diputado autonómico, el exalcalde de Llombai pidió públicamente disculpas. «No actué correctamente, me dejé llevar por los nervios y se produjo un incidente muy desagradable del que me siento responsable», afirmó a través de su perfil de facebook.

El juzgado de primera instancia de Picassent debió dictar el auto de convocatoria del juicio oral sin conocer que Forés se había convertido en parlamentario y que estaba aforado por ello. Hace diez años, Vicente Ferrer ocultó que era diputado nacional al ser interceptado por la policía cuando conducía ebrio y la sentencia condenatoria tuvo que anularse. El Supremo le rebajó la pena.

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