Cava de Requena, cronología de una batalla eterna

El TSJ avala en una sentencia el uso del término, pero la DO Cava lo va a recurrir

La bodega Torre Oria fue pionera en la elaboración de cavas en el término municipal de Requena.

La bodega Torre Oria fue pionera en la elaboración de cavas en el término municipal de Requena. / POR VICENTE MORCILLO

Vicente Morcillo

El Cava de Requena es una de las figuras de calidad agroalimentaria de la Comunitat Valenciana de mayor prestigio. Con más de diez millones de botellas comercializadas al año y alrededor de cuatro mil hectáreas de viñedo autorizado para la producción de uvas para Cava, el sector cavista se ha posicionado como generador de riqueza y ejemplo de sostenibilidad, contribuyendo a fijar población en el interior valenciano. Desde que en el año 1982 Torre Oria pusiese en el mercado sus primeras botellas de Cava, este vino espumoso (elaborado por el método tradicional de segunda fermentación en botella) se ha convertido en una de las bebidas mejor valoradas tanto en el mercado local como en el ámbito internacional.

La vinculación de Requena con el Cava se remonta a principios del siglo XX, con algunas elaboraciones de carácter experimental, aunque no sería hasta la década de los años ochenta cuando empezase a comercializarse el cava valenciano tal y como se conoce, si bien el trayecto desde entonces ha estado plagado de trabas y zancadillas por parte del propio Consejo Regulador de la DO Cava. Para entender la situación en la que se encuentra actualmente el cava valenciano es importante contextualizar el origen. En 1982 todavía no se había creado la DO Cava, y los vinos espumosos de todo tipo y origen se agrupaban en el Consejo Regulador de los Vinos Espumosos (donde Requena estaba integrado dentro de la categoría de método champenoise junto a los territorios de Cataluña, algunos municipios de Aragón y Navarra y el término extremeño de Almendralejo).

CAVA DE REQUENA

CAVA DE REQUENA / POR VICENTE MORCILLO

Con la entrada en la Comunidad Europea y ante las reclamaciones de la región francesa de Champagne, los productores catalanes de Cava lideran la creación de una denominación de origen específica para regular la elaboración de vino espumoso con el aún entonces conocido como método champenoise (posteriormente pasaría a denominarse oficialmente método tradicional), dejando fuera de los dominios del nuevo ente regulador al término municipal de Requena. Torre Oria, por entonces única bodega que elaboraba cavas en el municipio, llevó el asunto a los tribunales, consiguiendo, después de varias sentencias favorables, que la DO Cava incluyese entre sus territorios amparados la totalidad del término municipal de Requena, según se recoge en el Boletín Oficial del Estado del 19 de abril de 1993.

A partir de ese instante, el sector cavista valenciano vivió décadas de crecimiento, primero de manera más pausada, y a partir de la llegada del siglo XXI, con el nacimiento de nuevas bodegas, a mayor velocidad. En el año 2013 las bodegas de Requena adscritas a la DO Cava constituyen una Asociación con el objetivo de canalizar todos los esfuerzos que hasta ese momento se hacían de manera individual para promocionar la imagen de calidad del Cava de Requena. Con unas ventas que no dejaban de crecer campaña tras campaña, el sector cavista parecía consolidarse definitivamente, hasta que en 2019 el Consejo Regulador de la DO Cava propone una modificación en su pliego de condiciones para crear nuevas figuras de calidad e instaurar la figura de unidad geográfica menor para diferenciar las distintas zonas que conforman esta denominación de origen.

Y vuelta a empezar. El Consejo Regulador ha desoído las peticiones de las bodegas de Requena que planteaban el uso del término Requena para denominar esta zona de producción. El organismo esgrimía que la palabra Requena podía conducir a confusión por parte del consumidor al existir ya en el mercado el termino Vinos DO Utiel-Requena. La sentencia del Tribunal Superior de Justicia del 30 de noviembre de 2022 deja perfectamente argumentada la nula confusión y la convivencia «pacífica» de ambos productos en los últimos 40 años, sin que se haya podido constatar hasta la fecha la más mínima confusión por parte del consumidor entre ambos productos. La sentencia ha sido recurrida ahora por el Consejo Regulador de la DO Cava (pese a que el Ministerio de Agricultura ya había mostrado su voluntad de dar carpetazo al asunto), por lo que habrá que esperar a ver si éste prospera o finalmente se cierra esta última batalla del cava valenciano por poder ser reconocido en el mundo como Cava de Requena.