El antídoto contra la inexperiencia

El Valencia deberá sobreponerse en el tramo final del curso a una planificación de Meriton que en cada mercado le priva de jugadores veteranos

El antídoto contra la inexperiencia

El antídoto contra la inexperiencia / L-EMV

Pascu Calabuig

La planificación ordenada por Peter Lim, una vez más, puede jugar en contra del Valencia CF en la recta final de la temporada. El cuerpo técnico de Rubén Baraja ha acertado en la preparación mental del equipo más joven de las grandes ligas europeas junto al Chelsea y el Toulouse. Los blanquinegros, octavos, resisten en la lucha por un billete hacia las competiciones UEFA, pese a contar con la plantilla menos experimentada de la Liga tras las tres de los clubes ascendidos: Las Palmas, Granada y Alavés. Hasta ahora, la fórmula del partido a partido ha funcionado para ahuyentar la presión de un grupo cohesionado y comprometido contra cualquiera de sus límites.

Desde el mundo del fútbol suele decirse que la experiencia tiene que ver más con las vivencias acumuladas en la élite que con los años. La realidad es que tanto en un aspecto como en el otro, el Valencia está en el vagón de cola. Con una media de 24 años, el blanquinegro es el grupo de menor edad en Primera División. Además, en cuanto a lo que verdaderamente preocupa a los técnicos, los de Baraja son decimoséptimos en el ranking elaborado por ‘Transfermarkt’ en función del número de partidos disputados por equipo en la Liga.

Los 286 encuentros de José Luis Gayà en la Primera española suben hasta 63,04 la media de partidos por jugador en el Valencia, muy lejos de los más de 130 en rivales como Athletic (161,92), Atlético (161,64), Real Madrid (136,75) y Villarreal (133,86). La temporada irregular de los amarillos o, a la inversa, el buen curso de Las Palmas, el equipo con la menor carga de partidos en la competición, demuestran que la veteranía no es un factor determinante del rendimiento. No obstante, el hecho de conocer el terreno sobre el que se pisa sí sirve de ayuda, en especial, en el último tramo en el que se deciden ligas y objetivos.

En la plantilla actual, tras la pérdida en invierno de Gabriel Paulista, el club de jugadores con más de un centenar de partidos se reduce a seis, con uno de ellos, Mouctar Diakhaby, lesionado hasta 2025. Asimismo, el equipo se quedará sin el capitán Gayà, al menos, hasta finales de abril por una rotura muscular. En los próximos partidos, el grupo de veteranos en Primera División lo encabezará Dimitri Foulquier, que cumplió ayer 31 años. Entre Getafe y Valencia, el de Guadalupe suma 251 encuentros en La Liga. ‘Foulqui’ es el jugador de campo más mayor del equipo blanquinegro, y el segundo después del meta Jaume Domènech (33). Solo la Real Sociedad, con un único jugador en la treintena -Hamari Traoré-, junta en su plantilla menos treintañeros que los dos del Valencia, distanciado ampliamente de la media en la competición (8) y de rivales como Betis (12) o Villarreal (12), con los que luchará por hacerse sitio en Europa.

El aporte de hombres como Hugo Duro, Guillamón y Mamardashvili, cada vez más asentados en la élite, pese a su juventud, ha relanzado en esta segunda vuelta a los valencianistas. Los dos primeros han rebasado este curso los 100 partidos ligueros, mientras que el georgiano puede acabar con 94 tras cumplir dos años siendo el amo y señor de la portería. Pepelu, pieza también capital, se acerca a los 60 encuentros haciendo buenas sus vivencias en la primera división lusa al lado de André Almeida.

En cambio, el Valencia 23/24 contabiliza una quincena de futbolistas que apenas ha completado una Liga entera en España. Yaremchuk o Canós lo compensan con su experiencia en el fútbol belga o en la misma Premier. Otros como Mosquera, Guerra o Diego López, a fuerza de talento. Baraja tiene clara la forma de sacar lo mejor de ellos: «Lo importante es que se vayan estabilizando en un nivel. La trayectoria de un jugador se define con tiempo en una categoría. Tu trabajo te coloca donde mereces. El fútbol no engaña. Pero los jóvenes tienen esos momentos en que tenemos que apoyarlos».