Habrá más control sobre la hostelería pero no se aplicará la ZAS en Honduras

El gobierno de Catalá no recurrirá la sentencia por el ruido en este barrio ni tampoco la acatará hasta que sea firme

El nuevo ejecutivo local aplicará medidas contra los locales para que cumplan las ordenanzas y tratar de reducir las molestias a los vecinos

Foto de archivo de una manifestación contra el ruido en Honduras y El Cedro.

Foto de archivo de una manifestación contra el ruido en Honduras y El Cedro. / German Caballero

JM Vigara

El Ayuntamiento de València va a aumentar el control sobre los locales de ocio de la plaza de Honduras, El Cedro y calles cercanas pero no va a aplicar la Zona Acústicamente Saturada (ZAS) en ninguno de estos dos barrios. Así lo han confirmado fuentes municipales, tras la reunión que han mantenido los concejales Carlos Mundina y Juan Carlos Caballero con los representantes de la Asociación Vecinal Plaza de Honduras y adyacentes. En este encuentro había también responsables de los servicios jurídicos del consistorio y técnicos de la concejalía de contaminación acústica. La principal conclusión que sale de esta reunión es que el nuevo equipo de gobierno del PP, liderado por María José Catalá, no va a recurrir la sentencia que da la razón a los vecinos de Honduras y que ordena a la administración local implantar la ZAS en este barrio de València. Ahora bien, en este encuentro ha trascendido que el gobierno saliente, encabezado por Joan Ribó, sí recurrrió otra sentencia, referente al Cedro, que también obliga a aplciar la ZAS en este segundo barrio.

Los responsables del gobierno de Catalá se han comprometido "a aplicar medidas para establecer un mayor control sobre los locales" de ambas zonas de ocio de València, medidas de mayor vigilancia sobre la hostelería y las terrazas, que son una fuente de ruido y de molestias para los vecinos, tal como han coincidido los concejales y los vecinos.

En pocas semanas, este es el compromiso de los concejales Mundina ( Mejora Climática) y Caballero (Parques y Jardines) se aplicarán estas medidas de mayor control sobre los locales, tal como confirman fuentes vecinales y municipales.

Respecto al recorrido ante la justicia de las demandas presentadas por las entidades vecinales de Honduras y El Cedro, hay que recordar que las federaciones de hostelería han recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ-CV) ambas sentencias contrarias a sus intereses. En el caso de Honduras, el ayuntamiento no ha recurrido y la acatará cuando sea firme; y en el caso del Cedro, sí se recurrió por parte de los servicios jurídicos municipales por apreciar ciertas lagunas legales que la hacen susceptible de ser revocada o enmendada en el TSJ.

Cartel de "Stop ruido", en una protesta desarrollada en la zona de Honduras.

Cartel de "Stop ruido", en una protesta desarrollada en la zona de Honduras. / German Caballero

Los vecinos de Honduras continuarán su lucha en los tribunales

Mientras, los vecinos de plaza Honduras, tal como explica su presidente Javier Soler, "vamos a continuar con nuestra hoja de ruta en los tribunales". En ese sentido, tras el recurso de los hosteleros contra la ZAS en el TSJ, "nuestro abogado va a presentar alegaciones frente a ese recurso para que se dé por buena la sentencia anterior y para que se aplique la ZAS cuanto antes". "Hemos recbiido muy buena predisposición -afirma Soler- por parte de los concejales del nuevo gobierno local y se han comprometido a aplicar medidas de control sobre la hostelería". Son embargo, esto no es suficiente para las entidades vecinales "llevamos años de quejas y queremos soluciones ya" porque a su juicio "lo que tiene que hacer el ayuntamiento es aplicar las ordenanzas, poner sanciones y acabar con el descontrol" en los locales de ocio de la zona.

Javier Soler reitera que en Honduras, El Cedro y Blasco Ibáñez, la pacificación de la zona, la lucha contra el incivismo y el fin de la contaminación acústica y el botellón pasa por aplicar cuatro medidas inmediatas: reducir los horarios de apertura de los establecimientos, decretar una moratoria en la concesión de licencias, reducir el número de locales de hostelería e impedir la transmisión de licencias de actividades de unos negocios actuales a otros nuevos. En definitiva, aplicar medidas estrictas "para desincentivar la inversión en hostelería en estos barrios, donde hoy es muy rentable invertir", a su juiciio, en una hosteleria y un turismo de bajo coste, "muy rentable".

El equipo de Catalá buscará "el mayor consenso para garantizar el descanso de los vecinos"

Los portavoces del equipo de gobierno subrayan que el Ayuntamiento de Valencia ha abierto "una línea de diálogo y trabajo con el vecindario de la plaza de Honduras y su entorno, de cara a arbitrar e impulsar las medidas necesarias para frenar las molestias de la zona derivadas de la contaminación acústica". El concejal de Mejora Climática y Acústica, Carlos Mundina, y el delegado de Medio Ambiente, Juan Carlos Caballero, se han reunido este martes con una representación de la Asociación de Vecinos Ciudad Jardín, después de que el pasado mes de junio, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 5 de València instara al consistorio en sentencia judicial a iniciar la tramitación de la declaración ZAS (Zona Acústicamente Saturada) de la plaza de Honduras y calles adyacentes.

Dicha sentencia anuló el acuerdo previo adoptado en marzo del año pasado por la Junta de Gobierno Local, por el que se rehusaba iniciar el procedimiento dirigido a declarar la ZAS. Tras conocer la sentencia, el actual gobierno local decidió no recurrir la decisión judicial, y "abrir un proceso de diálogo con el vecindario y con las empresas de ocio y hostelería, dirigido a alcanzar un “amplio consenso” de cara a las medidas a adoptar".

De esta manera, los concejales Mundina y Caballero han mantenido hoy un primer encuentro con los representantes vecinales en el que han subrayado la importancia de establecer mecanismos de diálogo con todas las partes “desde el respeto a la seguridad jurídica”, tal como ha apuntado el concejal Carlos Mundina. Hay que tener en cuenta que contra la sentencia del 21 de junio todavía cabe recurso por parte de las partes afectadas, por lo que la voluntad del Ayuntamiento es acatar el mandato judicial, ir estableciendo medidas preliminares e ir avanzando en el cumplimiento de los requisitos de la ZAL con medidas que regulen la actividad de ocio.

Por parte del consistorio, "el personal técnico continuará trabajando para garantizar que se cumplen los derechos del vecindario al descanso, así como el de las empresas y locales de ocio". Tal como ha concluido Carlos Mundina al término del encuentro, “incluso sin iniciar la declaración de la ZAS, ya podemos ir viendo las medidas a impulsar para garantizar el cumplimiento de la ordenanza y el desarrollo pleno de todos los derechos”.

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