La Guardia Civil localiza al presunto pirómano de El Saler en el hospital

Ni se había ausentado temporalmente de casa, ni había huido de la presión a la que era sometido por el vecindario, los políticos y los medios de comunicación. El abogado de 59 años al que judicialmente se le acusa de los incendios de El Saler del pasado otoño y al que todo el mundo mira tras los incendios de enero y febrero ha sido localizado por la Guardia Civil en un hospital de la ciudad de València, donde fue ingresado a principios de semana por una dolencia grave, según fuentes oficiales. En consecuencia, los investigadores del Seprona han informado al juez y han adoptado la decisión de posponer su declaración hasta que reciba el alta médica y salga del centro sanitario.

Intentos de localizarlo sin éxito

La Guardia Civil llevaba varios días tratando de hablar con el presunto pirómano para interrogarle de nuevo por los últimos incendios en la Devesa, pero no recibieron contestación a sus llamadas, por lo que decidieron acudir al juez para comunicarle la situación y pedirle una orden que les permitiera entrar en su domicilio simplemente para comprobar que no estaba allí, no para hacer un registro. Tras entrar en la vivienda se comprobó que no había nadie y se puso en marcha su búsqueda, operación que finalmente ha permitido comprobar que se encuentra hospitalizado en València con una grave afección médica.

Al parecer, el ingreso se produjo a principios de semana y se desconoce el tiempo que permanecerá hospitalizado. Así pues, los investigadores del Seprona han comunicado al juez la situación y han optado por dejar el interrogatorio para cuando reciba el alta médica y salga del hospital.

Las preguntas

Entre las preguntas a las que tendrá que responder está la compra de una garrafa de parafina o las declaraciones de algún vecino que dice haberle visto en la zona del fuego en el momento de declararse. El propio acusado ya acudió la semana pasada a declarar al juzgado voluntariamente, tal como adelantó este periódico, para negar todas esas acusaciones. Según dijo entonces, la parafina era para encender la estufa que tiene en casa, situada allí en los bloques de la Devesa de El Saler; y los testigos podrían estar confundiendo su coche.