Los asesinatos machistas de dos mujeres y una niña en Madrid encienden todas las alarmas

Los asesinatos machistas, en menos de 24 horas, de dos mujeres y una niña de cinco años en Madrid han encendido todas las alarmas que, de momento, solo han conseguido las acusaciones cruzadas entre el bloque de izquierdas en la oposición y el gobierno de coalición entre el Partido Popular y la ultraderecha de Vox, uno de cuyos bastiones es la negación sistemática de la violencia machista.

Una violencia que este año ya supera las cifras del anterior, cuando aún falta un mes para que concluya 2023, en una tendencia que las asociaciones feministas califican de preocupante, ya que hasta ahora el número de asesinatos bajaba sin cesar desde el año de la pandemia y la reversión de ese descenso coincide con la entrada de la ultraderecha en las instituciones públicas municipales y autonómicas.

Tatiana Beatriz, de 25 años, su hija Abril, de 5, y Leticia, de 37, son las tres últimas víctimas mortales del machismo.

La última de ellas, que se convierte en la víctima número 52 de la violencia machista en España, es una enfermera a la que su marido, capitán del ejército de Tierra en activo, estranguló en el domicilio familiar, en el madrileño barrio de Vallecas, en la tarde del pasado sábado, 25 de noviembre, precisamente en la jornada señalada por las Naciones Unidas como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Eran las 19.00 horas, justo cuando las calles de toda España eran recorridas por decenas de miles de personas clamando contra esta lacra.

El presunto asesino, de 42 años, llamó por teléfono al 112 y anunció el asesinato. También contó que lo había hecho en presencia de las dos hijas de la pareja, de dos y tres años. Fue esta última quien relató a los primeros policías cómo «mi papá le pegó a mi mamá contra la pared». Las niñas están ahora con su abuela materna.

Tres crímenes en 24 horas

Leticia no falleció en el acto. Los médicos la encontraron en situación de parada cardiorrespiratoria, pero consiguieron estabilizarla y evacuarla de urgencia al hospital. Su estado era crítico. Lograron mantenerla viva hasta ayer, lunes, cuando finalmente falleció como consecuencia de las gravísimas lesiones cerebrales sufridas.

El asesino machista ingresó ayer en la cárcel por orden judicial, tras pasar las dos noches anteriores en los calabozos policiales.

Ese ingreso en prisión se producía apenas unas horas después de que un segundo crimen machista en la capital madrileña, con dos víctimas mortales, madre e hija, hiciese saltar las alarmas.

Las víctimas son Tatiana, una joven de 25 años que pasa a ocupar el puesto 53 en la lista de mujeres asesinadas en ataques machistas, y Abril, su hija de 5 años. Con ella son ya 51 los menores de edad asesinados en episodios de violencia vicaria en España desde que se inscriben de manera separada en las estadísticas policiales, algo que solo empezó a hacerse a partir del 1 de enero de 2013.

Viviendo con su maltratador

Ese doble asesinato se producía a la misma hora pero 24 horas más tarde. Ambas fueron acuchilladas por el exmarido de Tatiana y padre de la pequeña, Jhoel Antonio S.A., de 26 años, en el domicilio que seguían compartiendo por necesidades económicas pese a que la relación había terminado, situado en una urbanización de cuatro edificios en el distrito de Carabanchel.

Tras el doble crimen, se infligió heridas leves autolesivas. Fue detenido de inmediato y está previsto que esta mañana de martes sea puesto a disposición judicial.

El asesino había sido absuelto hace justo un año tras conseguir que un juez no creyese en la denuncia inicial de Tatiana, pese a que la Fiscalía mantenía una petición de pena de un año de cárcel.

De los 53 crímenes machistas de este año, en 13 constaban denuncias previas por maltrato (el 24,5 % de los casos). Como consecuencia de esos 53 asesinatos machistas, 53 menores han quedado huérfanos, 430 desde 2013, cuando comenzó el recuento oficial. Además, dos menores han sido asesinados en lo que va de año, 51 desde 2013.