El presidente del PP valenciano y de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, sigue la estela de la estrategia que el exlíder de Ciudadanos en la Comunitat Valenciana, Toni Cantó, mantenía hace ahora un año, justo en el trimestre en que la aprobación de los presupuestos autonómicos y del Estado concentra la mayor parte del debate. Mazón, como Cantó entonces, busca centralidad. En breve el líder del PP se reunirá con el president de la Generalitat, Ximo Puig. Cantó lo hizo el año pasado por estas fechas en distintas ocasiones. Puig ya ha anunciado su disposición a sentarse con Mazón y ambos gabinetes han hablado, aunque las agendas están pendientes de cerrar.
La petición de pactar enmiendas a los presupuestos del Estado que ha lanzado Carlos Mazón, pero que el Botànic ha rechazado también va en esa estrategia de acercamiento a Puig con la intención de proponer pactos conjuntos, una estrategia que claramente adoptó Toni Cantó. Incluso, el discurso de Mazón de este año suena al Cantó de hace doce meses. "Los políticos no estamos solo para recriminarnos cosas, sino que es el momento de poner en la mesa soluciones". Por ello, Mazón se ha puesto varias veces "a disposición" de Puig. "Donde, cuando y como él quiera", ha asegurado Mazón, el estilo al de Cantó es calcado.
El exlíder de Ciudadanos intentó el año pasado pactar los presupuestos autonómicos e incluso estuvo cerca de votar sí a las cuentas autonómicas, aunque al final se abstuvo. Mazón no llegará a tanto y lo normal es que el PP presente una enmienda a la totalidad, pero hay parecidos razonables entre el trimestre del año pasado en que Cantó se llevó todos los focos y en el momento actual y la estrategia puesta en marcha por Mazón.
Incluso el año pasado, Cantó presentó un bono comercio el año pasado que permitiera obtener descuentos para las compras en comercios de proximidad y hace unas semanas los populares se descolgaban con un bono exprés para incentivar las compras en el pequeño comercio. Cuando lo propuso Ciudadanos, el PP llegó a votar en contra de esa propuesta en una comisión de las Corts.
A ello se unen decisiones que ha adoptado Mazón en busca de más visibilidad y que ya en su momento tomó Cantó que resultan llamativas y que evidencian que hay un hilo conductor. Una de las primeras iniciativas que adoptó el actual líder del PP cuando llegó a la presidencia de los populares valencianos fue sumarse a la plataforma de la financiación, algo que Cantó ya había hecho tiempo atrás puesto que el ahora director de la Oficina del Español de la Comunidad de Madrid vio muy pronto que la reclamación de la financiación era una cuestión transversal en la que su partido no podía quedarse aparcado. Mazón también ha seguido ese camino dando un volantazo claro a la estrategia del PP en los tiempos de Bonig.
Esa similitud en el discurso y en la estrategia entre Mazón y la que adoptó Cantó se produce justo en un momento en el que Cantó empieza a tener cierta visibilidad de nuevo en la Comunitat Valenciana ya que será la estrella de los cursos que el PP provincial pretende poner en marcha en los próximos tiempos para aleccionar a sus cargos y el exportavoz de Ciudadanos ya participó el pasado 3 de octubre en el mitin de la plaza de Toros de València, donde el presidente nacional del PP cerró la convención de los populares.
En cambio, Ciudadanos ha enfriado mucho la relación con los socialistas que mantuvo Cantó, que se convirtió en un habitual de las reuniones en el Palau de la Generalitat con Puig hace un año. A Cantó le aportaba entonces moderación y a Puig también, lo que venía bien a ambos. Sin embargo, con Mazón es distinto. El presidente del PPCV busca ese espacio de moderación, pero no va tener la misma respuesta desde Presidencia. Aunque habrá reunión en breve, en ningún caso a Mazón los socialistas va a tender el puente de plata como hicieron con el exlíder de Ciudadanos.
Cuando Cantó desplegó esa estrategia su partido ya estaba tocado tras los resultados de las últimas generales, pero aún no había tocado fondo en Cataluña o la Comunidad de Madrid, elecciones celebradas este año y en las que Ciudadanos ha obtenido resultados que amenazan la viabilidad del propio partido, especialmente tras quedar fuera de la Asamblea de Madrid, momento que aprovechó Toni Cantó para dar el salto al partido de Isabel Díaz Ayuso y cambiar València por Madrid.
Por contra, aquella relación de Ciudadanos con Puig ha quedado muy enfriada. En la formación que ahora lidera Ruth Merino asisten molestos al incumplimiento de los acuerdos que hace un año se alcanzaron con los socialistas. Pero la situación es ahora muy distinta y Ciudadanos ya no tiene un espacio principal en la política valenciana como sí tenía entonces.
