El Gobierno abre la puerta a que los regantes deriven agua 'extra' para recuperar l'Albufera

La Confederación del Júcar convoca a las Acequias del Júcar, la de Favara y la de Quart 'para valorar la posibilidad de aportes extraordinarios' mientras Generalitat y Ayuntamiento presionan ante el riesgo de salinización y anoxia

El agua de la Albufera se tiñe de rojo

M. Á. Montesinos

Minerva Mínguez

Minerva Mínguez

Los regantes decidirán hoy el envío de agua 'extra' para el lago de l'Albufera, que arrastra desde hace más de un mes un notable descenso de sus niveles mínimos. La Confederación Hidrográfica del Júcar ya dejó claro ayer que no hará más envíos al margen de lo establecido en el Plan Hidrológico 2022-2027, ni de las concesiones otorgadas a las comunidades de regantes en el ámbito del parque natural. Así lo explicitaba poco después de la reunión a tres bandas con el Ayuntamiento de València y la Conselleria de Medio Ambiente para abordar el incumplimiento de la cota fijada en 2018. Sí hará de intermediario con la Acequia Real del Júcar, la de Favara y la de Quart «para valorar la posibilidad de aportes extraordinarios».

«El incumplimiento de los niveles en el lago de l’Albufera no es responsabilidad de la Confederación Hidrográfica del Júcar, ni tampoco es competente para establecer las normas de gestión del parque». Con esta declaración el organismo de cuenca resumía el encuentro con las dos Administraciones implicadas en el paraje valenciano: consistorio y Generalitat. Además, hacía hincapié en que por su parte había estado presente todo el equipo directivo, pero por la parte pública solo técnicos. «Ningún cargo con poder de decisión de la Dirección General del Agua ni del Ayuntamiento de València han acudido a la cita», remarcaba en su comunicado de prensa.

Además, la CHJ incidía en que la disponibilidad de agua en el bajo Júcar «está supedidata a la construcción de infraestructuras necesarias para conducir el recurso hasta l’Albufera». Punto en el que recordaba que dicha competencia «corresponde a la Generalitat Valenciana». Como ya avanzó Levante-EMV en su edición del pasado sábado al desvelar la delicada situación ambiental de l’Albufera, los responsables de la demarcación vuelven a eludir cualquier responsabilidad en que se esté vulnerando lo establecido por la Generalitat Valenciana en 2018.

Gola del Pujol en l'Albufera

Gola del Pujol en l'Albufera / Fernando Bustamante

«Parece razonable que la extensión de la Perellonà se debe ajustar a las condiciones meteorológicas del momento», recordaba. «Esta Confederación está cumpliendo escrupulosamente lo establecido», subrayan sus responsables frente a la petición del Ayuntamiento de València, propietario del lago, de solicitar «los hectómetros cúbicos necesarios para garantizar el nivel normativamente establecido».

«Esta Confederación está cumpliendo escrupulosamente lo establecido»

Unos ocho hectómetros

Según ha podido saber este periódico no se ha concretado el volumen concreto para recuperar el buen estado ecológico del humedal, aunque se apunta a unos ocho hectómetros cúbicos. Como se recordará, en la contestación de la CHJ a los responsables municipales y autonómicos se les indicaba su papel en el control de la sustracción de recursos hídricos hacia los campos. Lo cierto es que fue en la etapa del primer Botànic cuando desde el departamento que entonces dirigía la consellera Elena Cebrián se fijaron unos niveles mínimos para l’Albufera tras varias denuncias ante la Fiscalía Provincial de Valencia.

El tono marrón y el descenso del vaso han sido la tónica dominante desde octubre

El tono marrón y el descenso del vaso han sido la tónica dominante desde octubre / Fernando Bustamante

Datos de las estaciones de aforo

Los datos diarios de las estaciones de aforo de la CHJ certifican el incumplimiento en los niveles, dándose la circunstancia de que se ha llegado a estar a -3 centímetros. Algo que implica un grave riesgo de entrada de agua de mar y por tanto un incremento de la salinidad. Una de las mayores amenazas, hoy por hoy, para un paraje incluido en la Red Natura 2000. Hubo días incluso que las embarcaciones tuvieron serias complicaciones para salir a navegar, con el consiguiente perjuicio no solo ambiental sino económico por el turismo y la pesca.

El nuevo cónclave por l’Albufera está fijado para hoy martes, como ha podido confirmar este periódico con los responsables de la Acequia Real del Júcar (sistema Júcar) y los de las de Favara y Quart (sistema Túria). A la cita de ayer acudieron por parte de la Confederación del Júcar su presidente, Miguel Polo, el Comisario de Aguas de la demarcación, Marc García Manzana, Arantxa Fidalgo, Jefa de la Oficina de Planificación Hidrológica y Manuel Torán, Director Técnico. Conselleria avanzó ayer que este martes será el director general de Medio Natural, Raúl Mérida, quien estará presente.

«La situación es preocupante»

El Ayuntamiento de València, otra de las instituciones implicadas en la gestión del lago de l’Albufera reclamaba ayer al Gobierno, que «ordene» el aporte hídrico necesario para un óptimo estado ecológico. El concejal de Devesa-Albufera, José Gosalbez, no dudaba en calificar de «preocupante la situación» de la laguna. «Los aportes son de extrema necesidad», insistía el edil de Vox, que ostenta las competencias en esta parcela. Desde el consistorio se recordaba que ante la previsible bajada del nivel del lago se optó por mantener las compuertas de las golas cerradas para evitar la salida de agua.

«Esto ha permitido un grave impacto sobre el lago y los usos económicos como la pesca o el turismo que hubieran causado, por ejemplo, un secado mucho más drástico o la salinización del sistema», subrayaban. Por su parte, el exvicealcalde Sergi Campillo y anterior responsable de Devesa-Albufera reprochaba al actual equipo de gobierno que no hubieran hecho acto de presencia en la reunión con la Confederación del Júcar. «Es evidente que ni el gobierno de PP y Vox en el Ayuntamiento y ni tampoco el de la Generalitat tienen ningún interés por los temas medioambientales», zanjaba.

La Conselleria de Medio Ambiente recuerda que la falta de agua aboca a la anoxia y la salinización

La Generalitat instaba ayer a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) a derivar «el agua suficiente para garantizar los aportes necesarios a l’Albufera», tal y como establece el Plan Hidrológico del Júcar 2022-2027. Esa fue la petición que trasladaron ayer al equipo directivo del organismo de cuenca, con su presidente Miguel Polo a la cabeza.

Aunque por parte de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio solo acudieron técnicos, en un comunicado posterior desde el departamento de Salomé Pradas se incidía en que se había puesto de manifiesto en el encuentro de trabajo que, debido a la sequía, «tanto el nivel del agua del lago como su calidad se han visto seriamente comprometidas por el crecimiento masivo de algas debido, sobre todo, a la falta de flujo que se produce de octubre a mayo cuando las compuertas están cerradas y los nuevos aportes dependen de las lluvias de otoño e invierno».

Medio Ambiente insiste en que está llevando a cabo «una vigilancia continuada tanto de la extensión de la inundación invernal como de la calidad del agua y, en especial, la posible aparición de anoxias que causaran mortandades de animales y plantas».La Generalitat apela a la colaboración de la CHJ que haga posible el aporte del agua que l’Albufera necesita para su inundación invernal, evitar la salinización de los marjales y la mejora de los suelos».

m.mínguez. valència