Objetivo: salvar la Feria de Julio

Las constantes vitales que ofreció la Feria de Julio en la plaza de torosde València hace un año no eran halagueñas: el ciclo taurino en honor a San Jaime, que históricamente fue el mejor y más completo en el Cap i Casal, estaba en graves urgencias por la escasez de público que arrojaron los carteles confeccionados por la empresa Espacios Nautalia 360, la marca de Nautalia Viajes para la gestión integral de cosos taurinos. No hay que olvidar que la llamada Fira de Sant Jaume fue, a mediados del siglo XIX, una de las fiestas más atractivas que ofrecía València. Por ejemplo, especialmente significativa fue la Feria de San Jaime de 1950, en la que no se dio ni una sola corrida de toros, acontecimiento que no se ha vuelto a repetir en la historia del toreo. Seis novilladas, celebradas entre el 24 y 29 de julio, con Miguel Báez y Espuny, "Litri", y Julio Aparicio Martínez en cada uno de los carteles. Y todo ello apenas cumplidos dos años de la muerte de Manolete en Linares, un torero que triunfó en la Feria de Julio de 1942 y recibió un premio de 25.000 pesetas que regaló a los pobres y un capote de paseo que donó a la Virgen de los Desamparados. Dos años después, en la misma Feria de Julio, Manolete, ganando por tarde más que ningún otro torero en la historia de la tauromaquia hasta el momento, lidió al famoso toro "Perdigón", un ejemplar lucero de José Escobar marcado con una V de la victoria en su testuz que el monstruo envió a Winston Churchill como regalo.

Pero hace justo cincuenta años, el crítico taurino Recorte escribía en estas páginas un párrafo que bien podría tener el mismo encaje en la actualidad: "Por muchas circunstancias, la Feria de Julio está casi sin vida. De fuera no viene gente a pasar calor y los que viven en València emigran a las playas o a la montaña en busca de un clima más fresco. Habrá, pues, que pensar, y no creemos decir ninguna tontería, el cambiar esta Feria de fecha. En muchas poblaciones ha ocurrido esto ya y ha dado un buen resultado".

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La fuerza del "No hay billetes"

Eso sí, este año la Feria de Fallas pareció recuperar el músculo taurino entre la afición para mostrar una salud más fuerte con buenas entradas en los tendidos a pesar de los elevados precios de las entredas y con la mejor noticia: el "No hay billetes" que solamente logró Andrés Roca Rey con la poderosa fuerza de su carisma y que fue una bola de fuego purificador para València. Hacía tres años, pandemia incluida, que no ocurría. Lo mismo ocurrió hace unas semanas en el cuarto festejo de la Feria de Hogueras de Alicante, en la que el torero peruano llenó la plaza hasta la bandera (11.262 espectadore según la empresa) y triunfó junto a Julián López 'El Juli' y Tomás Rufo. Una imagen idéntica se vio en la plaza de toros Monumental de Las Ventas de Madrid con sus tres tardes, donde Roca Rey también puso el cartel de "No hay billetes" con 24.000 aficionados cada día; o en la Real Maestranza de Sevilla, con 12.500 localidades llenas cada tarde. Sus "No hay billetes" de cada día y sus triunfos, especialmente su última comparecencia en Madrid en la que ofreció una imagen de figura absoluta del toreo en medio de una guerra abierta entre el tendido 7 y el público de Las Ventas, lo catapultan al primer puesto del escalafón. Roca Rey concentra todas las miradas y, por lo tanto, Nautalia Viajes no ha dudado en contratarlo otra vez en València, donde todos los años que ha toreado ha salido por la puerta grande.

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Un fenómeno natural único

Con esa fuerza que traslada su tauromaquia, el joven torero peruano tratará de devolverle a la Feria de Julio el esplendor que nunca tuvo que perder. El fenómeno natural en el que se ha convertido su valor, el terremoto que levanta su carisma en el centro del ruedo, la erupción del volcán que supone su apasionada entrega hace que en València quiera mostrarse ante todo su esplendor. Hace falta cierto heroísmo para tener ese ambiente entre la afición, hay que ganárselo día tras día con mucho esfuerzo que quitaría el aliento a cualquier otro mortal. El joven peruano toreará el sábado 22 de julio los toros de Hermanos García Jiménez, propiedad de Matilla, junto a Alejandro Talavante y Cayetano Rivera.

Por su parte, Morante de la Puebla es el otro gran atractivo de la feria tras su histórica faena en Sevilla. Y hará lo propio el viernes 21 junto a Julián López 'El Juli' y José María Manzanares, triunfador de la Feria de Fallas, frente a toros de Juan Pedro Domecq.

El argumento torista con la vuelta de la ganadería de Miura será el domingo 23 con Fernando Robleño, que volverá a València después de 9 años; el valenciano Jesús Chover, que volverá en la que será su tercera corrida de toros en esta plaza; o el castellonense Paco Ramos.

La suerte está echada. El toro está a punto de salir. Y el misterio del toreo estallará en la Feria de Julio. Suerte a todos.

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