Compromís acusa al alcalde de Alfarb (PSOE) de incumplir el pacto con la consulta popular sobre el topónimo

La formación valencianista recuerda al socialista Mínguez que los temas relevantes debían ser consensuados aunque no se plantea dejar el gobierno

El monumento de una rotonda en el que ha desaparecido la "b" del topónimo en valenciano.

El monumento de una rotonda en el que ha desaparecido la "b" del topónimo en valenciano. / Levante-EMV

El portavoz de Iniciativa-Compromís en el Ayuntamiento de Alfarb, Vicent Alfonso, considera que la consulta popular que el alcalde pretende celebrar sobre la normalización del topónimo -la forma en valenciano fue aprobada en mayo por la Generalitat- «incumple el pacto de gobierno» ya que, según señala, el acuerdo con el PSOE contemplaba que todos los asuntos de relevancia debían ser consensuados por los dos integrantes de la coalición. 

Alfonso reconoce que esta situación se ha abordado a través de las direciones comarcales del PSOE y Compromís con el objetivo de disuadir al alcalde, Raúl Mínguez, sin haberlo logrado. De hecho, en el último pleno se acordó solicitar autorización al ministerio para celebrar esta consulta y el ayuntamiento está a la espera de respuesta.

Pese a señalar el incumplimiento del pacto, Compromís no se plantea abandonar la coalición de gobierno. «Queremos llevar a cabo nuestras políticas y por eso queremos estar en el gobierno», señala el tenient de alcalde. 

La formación valencianistas es el grupo mayoritario en la coalición de gobierno con cuatro concelajes por uno del PSOE, que decantó la balanza hacia la izquierda -el PP también cuenta con cuatro escaños- con un pacto que se apuró hasta el último día y por el que Mínguez ostentaría la alcaldía durante los primeros quince meses de mandato.

El alcalde socialista, que siempre ha recelado de la forma en valenciano del topónimo, Alfarb con «b», ha impulsado esta consulta popular para decidir si se mantiene o se recupera la denominación en castella que finaliza en «p».

Alfonso considera que el ministerio no autorizará la consulta tras haber aprobado hace escasamente «seis o siete meses» la forma en valenciano en un procedimiento que siguió el cauce legalmente establecido por lo que no hay ninguna irregularidad que pueda justificar ahora el cambio.