Aguas de Valencia financiará la obra para llevar agua potable a Palma de Gandia y la repercutirá en los recibos

El ayuntamiento aprueba los trámites que desbloquean el proyecto y confía en disponer en breve de los permisos necesarios para empezar

Las viviendas y empresas de la localidad pagarán 6,25 euros al mes durante 25 años para amortizar la inversión de la empresa

Manifestación en Palma de Gandia reclamando financiación para el agua potable

Manifestación en Palma de Gandia reclamando financiación para el agua potable / Levante-EMV

Los vecinos y las vecinas de Palma de Gandia ya empiezan a vislumbrar el final del problema de suministro de agua potable que vienen sufriendo desde el pasado mes de octubre. El pleno celebrado la tarde de este martes aprobó, por unanimidad, varias cuestiones que permiten desbloquear el asunto. El primero y más importante, la financiación. Finalmente, será la concesionaria del servicio, Aguas de Valencia, la que pagará la obra para transportar agua desde el pozo de la Mancomunitat de la Safor, ubicado en Villalonga. El coste total de la actuación, según el proyecto, es de poco más de 1 millón de euros, con el IVA incluido (828.894 sin impuestos).

El acuerdo implica que, posteriormente, una vez vuelva a correr agua corriente por los grifos de los vecinos y las vecinas de la localidad, la empresa vaya recuperando dicha inversión con una tasa que se incluirá en la factura. Había dos opciones: que cada abonado pagara 6,26 euros al mes durante 25 años o, en cambio, que el desembolso fuera de 9,71, lo que rebajaría a 12 años el periodo de amortización. Finalmente se optó por la primera.

Otra de las cuestiones que aprobó el consistorio, también con el voto favorable de todas las personas que forman la corporación municipal, fue la declaración de urgencia de la obra. El motivo de este trámite es que el ayuntamiento disponga de soporte legal para poder iniciar los trabajos mediante contratación directa, sin tener que pasar por una licitación que dilataría el proceso. Los concejales y concejalas también dieron el visto bueno al proyecto técnico.

De ese modo, Palma de Gandia pone en marcha toda la maquinaria para que puedan arrancar unos trabajos que son vitales para sus vecinos y vecinas. La alcaldesa, Paula Femenia, confía en que este mismo año 2024 ya esté realizada la conexión al pozo de Villalonga, teniendo en cuenta que la actuación tiene una duración estimada de unos seis meses.

Aunque la maquinaria está en funcionamiento, el tiempo que tarden en arrancar las obras ya no depende directamente del consistorio. Ahora hay que esperar a que los ayuntamientos de Ador y Potries, por los que pasa la tubería, así como la Diputación de València, debido a que el trazado también atraviesa la carretera, y la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), tienen que conceder los pertinentes permisos de obra. "Creemos que serán rápidos. Entendemos que deben estudiar bien el proyecto y la documentación, pero atenderán al hecho de que se trata de una obra urgente", apuntaba Femenia en conversación con Levante-EMV.

Una posibilidad contemplada

Femenia ha explicado que la financiación por parte de Aguas de Valencia (que recuperará después con cargo a los vecinos y las vecinas) era una posibilidad que se había contemplado desde las primeras reuniones de la comisión de seguimiento, a pesar de que se han estado buscando otras alternativas en administraciones supramunicipales.

De hecho, pese a que ya se ha aprobado el plan de financiación, el ayuntamiento no renuncia a que aún puedan llegar esas ayudas. La concesionaria tiene el compromiso de recalcular la tarifa propuesta en el caso de que el consistorio obtenga cualquier tipo de subvención y lo destine a amortizar la deuda. Esto repercutirá, bien en una bajada de la cuantía que abonarán los vecinos y las vecinas a través del recibo o con la reducción del tiempo durante el cual se pagará esa tasa.

Durante las últimas semanas, el ayuntamiento ha mantenido un fuerte desencuentro con la Diputación de Valencia respecto a la financiación de la obra. El municipio solicitaba a la entidad provincial una ayuda singular y directa para hacer frente a la obra, mientras, que, en palabras del propio presidente, Vicent Mompó, esta administración instaba al consistorio a utilizar el dinero del Pla Obert d'Inversions, que asciende a un millón de euros, asegurando que con esa partida tenía "suficiente".