El Seprona revisa la estufa de parafina del presunto incendiario del Saler
La Guardia Civil acude al domicilio del investigado, con autorización del mismo, para corroborar la veracidad de sus manifestaciones
El investigado por los incendios del Saler, tras ser puesto en libertad, acompañado de su letrado. / I. Cabanes
Antes de abandonar su domicilio, en el cumplimiento de la medida cautelar adoptada por el Juzgado de Instrucción número siete de València, que amplió la orden de alejamiento a toda la Devesa del Saler –como adelantó ayer en exclusiva este periódico–, el abogado investigado por un delito continuado de incendio forestal agravado accedió a que los investigadores del Seprona de la Guardia Civil volvieran a entrar en su apartamento, ubicado en la propia zona protegida afectada por los fuegos , para que éstos pudieran comprobar si realmente tiene una estufa de parafina en el inmueble, cuando la adquirió y si está en perfecto estado de uso.
Agentes del Seprona han acudido esta mañana a la vivienda del investigado como presunto autor de la oleada de incendios intencionados registrados en este paraje natural desde el pasado verano. El abogado valenciano autorizó esta nueva entrada domiciliaria para que constatar la existencia de la citada estufa de parafina. Asimismo, le instaron a que la probara y aportara la documentación que acredite la fecha de su compra.
Esta diligencia, acordada previamente por el juez, ha servido para corroborar las alegaciones que dio el investigado cuando el pasado 14 de febrero acudió voluntariamente ante el juez instructor para aclarar una serie de cuestiones. En su comparecencia confesó haber comprado una botella de parafina de diez litros para la estufa con la que calienta su apartamento, como adelantó Levante-EMV.
Tiene de plazo hasta el lunes para abandonar el domicilio
J. C. E., de 59 años, tiene de plazo hasta el próximo lunes cuatro de marzo para mudarse a otro domicilio, ya que a partir de ese día si es localizado en cualquier punto de la Devesa del Saler, podría ser detenido de nuevo por un delito de quebrantamiento de medida cautelar.
De hecho, tiene un juicio pendiente precisamente por idéntico delito, por el que se enfrenta a una pena de multa de 2.700 euros, que solicita el fiscal, por haber quebrantado presuntamente la anterior orden de alejamiento, que únicamente le impedía aproximarse o internarse en las zonas boscosas de la Devesa.
La Fiscalía solicita una pena de multa de 2.700 euros por el delito de quebrantamiento de medida cautelar
El supuesto quebrantamiento se habría producido entre los días 26 y 28 de enero, cuando un testigo asegura haberlo visto por un camino de tierra dentro del paraje natural, aunque el investigado niega este extremo.
Por los dos últimos incendios que se le imputan, del 11 y 12 de febrero, el juez acordó ayer su libertad ante la «insuficiencia de las diligencias practicadas a efectos de la atribución de su autoría». Eso sí, adoptó como medida cautelar ampliar el alejamiento a toda la Devesa del Saler, no solo a las zonas boscosas, y la colocación de una pulsera de localización permanente, aunque dicho dispositivo queda a la espera de que las autoridades y organismos competentes se la instalen cuando haya "disponibilidad", como adelantó ayer este periódico.
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