Picanya construye una plaza interior con ascensor para subir a las casas más antiguas

Picanya vuelve a ser ejemplo de innovación urbanística con la construcción de una nueva plaza pública que, bajo el nombre de Plaza Indalecio Miguel, permitirá mejorar la accesibilidad de los bloques de viviendas más antiguos del pueblo, de los años 50-60. Ya están en marcha las obras de la segunda fase, que consiste en la mejora del alcantarillado en las calles Ramón y Cajal, Santa Maria del Puig y del Pilar.

Para poder resolver la mejora de la accesibilidad de estas viviendas que, por su antiguedad no disponen de ascensor, el Ayuntamiento de Picanya decidió la adquisición de un solar interior ocupado por dos almacenes que, con las nuevas obras pasará a ser una plaza donde se podrá instalar un ascensor interior que dará acceso en unas pasarelas de acceso directo a las viviendas por la parte de atrás. Para acceder a la plaza se usarán dos puertas de antiguos garajes, una en Ramón y Cajal y otra en Gómez Ferrer, que incluso podrán ser cerradas por la noche, para grantizar la seguridad de los vecinos.

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En este sentido el Ayuntamiento de Picanya realizó todas las gestiones necesarias para obtener las ayudas del programa ARRUR del Plan estatal de vivienda. Unas ayudas destinadas a promover la conservación, optimización de la eficiencia energética y la accesibilidad, en los edificios de mayor antigüedad del municipio así como la mejora del entorno urbano.

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El proyecto presentado por el ayuntamiento, destinado a mejorar las viviendas que afectan a cerca de 60 familias, fue valorado muy positivamente tanto por el Ministerio como por Consellería y, con una financiación de más de 800.000 euros a la cual el consistorio de Picanya sumará una cantidad que podría ascender hasta 1.100.000 euros aproximadamente, donde se cubrirá el IVA de las obras entre otras cosas.

Las obras proyectadas abordan temas tan importantes como la seguridad estructural de los edificios, que tienen que adaptarse a los nuevos cánones. También, en la medida posible, se mejorará la accesibilidad con la eliminación de barreras arquitectónicas y la mejora de las condiciones de eficiencia energética con mejores aislamientos.

Esta actuación es pionera en la Comunitat Valenciana puesto que Picanya se convierte en el primer municipio en ser agente rehabilitador. 

Participación ciudadana

El Ayuntamiento de Picanya consensuó con los vecinos, a través de varias reuniones, cuál sería la mejor solución a los problemas de acccesibilidad. El personal técnico municipal aprovechó estos encuentros para explicar las opciones, posibilidad y desarrollo del proyecto y, al mismo tiempo, responder a todas las dudas planteadas por vecinas y vecinos.

Estos encuentros resultaron fundamentales en la hora de terminar la solicitud que fue finalmente aceptada tanto por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del Gobierno de España y de la Consellería de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio de la Generalitat Valenciana.

Dada la gran dificultad administrativa, técnica y burocrática del proyecto, y a pesar de que la titularidad de las ayudas corresponde a las comunidades de vecinas y vecinos, el ayuntamiento ofreció a las comunidades interesadas el apoyo de los servicios técnicos municipales para que se hicieron cargo de la gestión del proyecto. De este modo será el personal municipal el que se encargará de la coordinación, puesta en marcha y desarrollo final de un proyecto que, por su volumen, se alargará durante unos años de intenso trabajo.

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