Ejercicio de transparencia en Pedreguer: las fiestas de julio costaron 342.760 euros y el ayuntamiento aportó 182.983 euros

El libro de fiestas publicará las partidas desglosadas de la celebración de Sant Bonaventura

El público de Pedreguer durante una de las actuaciones de las fiestas de julio

El público de Pedreguer durante una de las actuaciones de las fiestas de julio / A. P. F.

A. P. F.

La fiesta es sinónimo de tirar la casa por la ventana. No es el caso de Pedreguer. El libro de fiestas de Sant Bonaventura irá más allá de recoger la programación festera. Dedicará unas páginas a la áspera contabilidad, al balance de gastos e ingresos. Aparecerán desglosados todos los gastos de las fiestas del año anterior. El gobierno local, de Compromís, afirma que la ciudadanía merece este ejercicio de transparencia y precisa también que poner negro sobre blanco las partidas festeras "evita especulaciones". No es escatimará ninguna aclaración. Estará detallado lo que aporta el ayuntamiento y los ingresos que se obtienen del alquiler de los "palcos", de la publicidad del libro de fiestas y de los actos que organiza la comisión.

La concejalía de Hacienda no ha querido esperar al libro de las próximas fiestas de julio para desvelar lo que costó la celebración del pasado año. El gasto total subió a 342.760 euros. El ayuntamiento aportó 182.983 euros. La aportación directa a la comisión fue de 133.000 euros. Los otros 49.983 corresponden a pagos extraordinarios a Iberdrola, informes de seguridad de las instalaciones taurinas, lavabos portátiles, publicidad en la prensa, alquiler de barreras, arena para el castillo, camión grúa, seguro de toros, montaje del corral y la jaula, así como del coste de la "cordà", las horas extra de la policía local o el salario de los directores de las fiestas.

Mientras, 73.065 euros salieron del alquiler de los "palcos" de la publicidad del libro de fiestas. Los restantes 86.712 euros los recaudó la comisión en los actos que organiza a lo largo del año.

Lo de la nebulosa del gasto en fiestas (los ayuntamientos suelen ser reticentes a la hora de difundir estas partidas) no va con Pedreguer. Las fiestas no pueden ser un pozo sin fondo.