La Policía Local multará a los patinetes sin certificado desde el 22 de enero

Una vez finalizado el período transitorio de aplicación de la medida, a partir del próximo 22 de enero, los patinetes eléctricos que circulen por las calles de València y sus pedanías tendrán que estar certificados y homologados, según lo previsto en el manual de características técnicas de los Vehículos de Movilidad Personal (VMP) que se publicó en el Boletín Oficial del Estado el 21 de enero de 2022, según las normativas impuestas por la Dirección General de Tráfico. 

Los VMP comercializados hasta el 21 de enero de 2024 podrán circular hasta el 22 de enero de 2027 aunque no dispongan de certificado. A partir de dicha fecha, solamente lo podrán hacer los VMP que cuenten con la certificación.

Ahora bien aunque es la DGT la que fija las normas de tráfico que imperan para estos dispositivos de movilidad, la institución encargada de velar por el cumplimiento de las normas de circulación es la Policía Local y, por extensión, el Ayuntamiento de València, y la concejalía de Movilidad.

De hecho, fuentes municipales han confirmado que Policía Local y Movilidad están trabajando ya en una campaña informativa, que pondrán en marcha en los próximos días, para informar a los conductores de patinetes de que tienen que adaptarse a las nuevas normativas de Tráfico o se expondrán a multas importantes.

El Ayuntamiento de València va a encargar cientos de trípticos que distribuirá en distintos puntos de interés, entre ellos, negocios dedicados al alquiler de bicicletas y patinetes eléctricos.

Estas acciones de concienciación e información serán previas a la aplicación de sanciones y multas a aquellos propietarios y usuarios de VMP que no estén certificados.

Estos son los patinetes eléctricos homologados

Las características de estos vehículos homologados figuran en el manual de Tráfico y son muchas las marcas y los fabricantes que se han adaptado a sus exigencias. El resultado es que desde el 22 de enero, estos patinetes eléctricos podrán circular a una velocidad máxima de 25 km/hora, a partir de la cual el motor dejará de impulsar al vehículo. Además, dispondrán de sistemas antimanipulación, tanto para la velocidad como para la potencia. También deberán disponer de un indicador de información visible en el que conste la velocidad a la que va y el nivel de batería.

Además, todos estos vehículos destinados al transporte personal deberán disponer de dos frenos independientes y los dispositivos de más de 2 ruedas deberán disponer de freno de estacionamiento. Por ende, los VMP deberán estar equipados de catadióptricos -luces reflectantes- frontales (blanco), en ambos laterales (blanco o color amarillo auto) y traseros (rojo). En esa línea, la luz de freno deberá estar diferenciada o combinada con la luz trasera.

Igualmente será obligatorio disponer de un avisador acústico y, en el caso de los destinados a mercancías u otros servicios, deberán llevar también avisador de marcha atrás.

Por ende, todos los patinetes eléctricos homologados deberán disponer de un marcaje de fábrica único, permanente, legible y ubicado de forma claramente visible con información sobre la velocidad máxima, el número de serie, el número de certificado, el año de construcción y la marca y modelo.

A todo ello se une una especie de matrícula o portaidentificador, que deberán llevar en la parte trasera, con un espacio donde figurará una identificación o etiqueta de registro. Por último, en el manual se detallan otras características más orientadas a calidad como integridad estructural y compatibilidad electromagnéticas, resistencia a la humedad, protección de batería ante temperaturas elevadas y superficies antideslizantes.