La Policía Local contará con una nueva unidad contra el botellón y las reyertas

El comisario jefe avanza en la creación de un nuevo destacamento que combatirá las bandas urbanas y vigilará los mercados ambulantes

La Unidad Centralizada de Respuesta estará formada por agentes expertos en armas y manejo de tumultos, y deberán superar unas pruebas físicas

Agentes de la Policía Local en un operativo especial contra el botellón en Honduras.

Agentes de la Policía Local en un operativo especial contra el botellón en Honduras. / Francisco Calabuig

JM Vigara

La Policía Local de València creará una nueva unidad especial, denominada en principio Unidad Centralizada de Respuesta (UCR), que se va a especializar en actuar frente al botellón, las bandas urbanas, las reyertas y las peleas multitudinarias en las calles. Esta nuevo destacamento sustituirá a la Unidad de Convivencia y Seguridad (UCOS) que fue creada en julio de 2021 y que una sentencia del TSJ ordenó en junio que se disuelva porque las condiciones de trabajo de los funcionarios que la integraban no fueron pactadas con los sindicatos. La sustitución de esta unidad será aprovechada por el Comisario Jefe José Vicente Herrera y el concejal de Protección Ciudadana Jesús Carbonell para poner en marcha una serie de cambios en el cuerpo, en la línea de lo anunciado recientemente por la alcaldesa María José Catalá que quiere atajar los problemas de botellón y "los puntos calientes" de más conflicto en la ciudad, con peleas multitudinarias y reyertas como las que ha sufrido la ciudad en plaza de Honduras, Castellar-l'Oliveral o la Cruz Cubierta. El más importante de estos cambios es la creación de esta nueva unidad policial, para la que ya hay un borrador interno, que se ha trasladado a comisarios, mandos y centrales sindicales, para que preparen sus aportaciones al mismo. Sin embargo, este documento previo es muy clarificador sobre cómo será este nuevo destacamento que se pondrá en marcha a la mayor brevedad posible.

Presentación de los nuevos policias locales y vehículos, en un acto celebrado en enero de 2022.

Presentación de los nuevos policias locales y vehículos, en un acto celebrado en enero de 2022. / Fernando Bustamante

Agentes rápidos menores de 55 años y expertos en armas

Entre otros aspectos, se especifica que los futuros integrantes de la UCR, todos ellos agentes en activo de la Policía Local de València, tendrán que ser menores de 55 años y deberán superar una serie de pruebas físícas exigentes para integrarse en la misma, en concreto, carreras de resistencia y de velocidad, según indican fuentes policiales. Además se valorarán con alta puntuación estar en posesión de una serie de cursos en materia de control de masas e intervención en situaciones donde el orden público esté en peligro; y que los agentes tengan cursos que acrediten buen dominio del armamento y el tiro; también el denominado curso Tasser; y conocimientos en el abordaje del problema de las bandas urbanas y la violencia callejera radical. Igualmente, los candidatos tendrán que pasar una entrevista personal con los mandos que puntuará de forma importante para ser incluidos en esta unidad.

Junto a esta primera función de mantener el orden público en la calle, la nueva unidad será también un ariete policial contra la venta ilegal de productos en los mercados ambulantes y para garantizar la convivencia y combatir el problema de los ruidos y las molestias causadas por la hostelería y los establecimientos dedicados al ocio nocturno. De hecho, también el conocimiento de estas materias, acreditado con cursos, se puntuará de forma especial entre los agentes aspirantes a enrolarse en el nuevo destacamento. Por tanto, el control y la vigilancia de los mercados será otra de las funciones que desempeñará la UCR. En gran parte, esta eran las funciones que desempeñaban los GOES, o Grupos Operativos Especiales de Seguridad, que en la época de Rita Barberá, también trabajaban en los mercados de la ciudad.

Diversas fuentes policiales y sindicales consultadas por Levante-EMV han mostrado su "extrañeza" porque se quiera hacer un proceso selectivo interno para escoger a los trabajadores que formarán en el futuro la UCR. Sobre todo por exigir a los policías en activo que pasen una serie de pruebas físicas, que es una práctica inusual, que casi nunca se ha hecho en la Policía Local. Este requisito y estar en posesión de los cursos de armas y orden público ya descritos ha molestado a los sindicatos porque entienden que perjudicarán a los actuales componentes de la UCO, más de 80 agentes que no reúnen estas condiciones en muchos casos. De hecho, UGT, CCOO y SPPLB han mostrado ya su preocupación por este contingente y cuyo futuro queda en el aire, con este proyecto de nueva unidad, que necesitaría al menos 120 policías, en tres turnos de mañana, tarde y noche. La sentencia del TSJ no afectaba a los UCOS de la noche, pero con la creación de la UCR, su futuro queda en el aire, aunque todas las condiciones laborales tienen que pactarse en la Mesa Técnica.