Sagunt ahorra 3,3 millones para gastar este año

En tiempo récord y con resultados muy buenos, en general. Así se ha saldado la liquidación del Ayuntamiento de Sagunt a 31 de diciembre de 2023, de la que el gobierno local dará cuenta en el pleno de este jueves. Entre la documentación que acompaña este expediente destaca el informe de control por parte del interventor, que, en el escenario de un ahorro neto y un superávit positivos, concluye que "las condiciones de solvencia financiera están garantizadas".

La cobertura presupuestaria de los gastos de la Seguridad Social se quedó corta por 152.000 euros

Los principales números de esta liquidación, tal y como adelantó Levante-EMV, elevan los ingresos municipales durante el pasado ejercicio por encima de los 98 millones de euros, mientras que los gastos se quedaron ligeramente por debajo de los 88 millones. En ambos casos, aunque especialmente en el primero, se trata de niveles de récord para las arcas municipales.

A estos 10,1 millones de diferencia se les restan casi 5 millones por las desviaciones de financiación afectada, de tal forma que el resultado presupuestario ajustado de 2023 arroja un saldo positivo por encima de los 5,1 millones, sensiblemente mejor que el anterior ejercicio, cuando rondó los 3,6 millones de euros, según siempre la información del propio Ayuntamiento de Sagunt.

Superávit para gastos generales

A la hora de evaluar el estado económico al cierre del pasado ejercicio, las cuentas del interventor arrojan un superávit de cerca de 3,3 millones de euros, de los que el gobierno municipal puede disponer para gastos generales, previa autorización plenaria, a lo largo del ejercicio. El habilitado nacional llega a esta cantidad tras aplicar al remanente total de tesorería de 24,3 millones de euros, las rebajas por los saldos de dudoso cobro (8,7 millones de euros) y el exceso de financiación afectada (12,3 millones de euros). Estas dos variables, que representan respectivamente los ingresos pendientes de anteriores ejercicios y el dinero que está en caja, pero ligado a actuaciones concretas, están por encima del año anterior, especialmente la segunda que casi se duplica.

Otro de los indicadores económicos que sigue una tendencia negativa es la cuenta 413, más conocida como las facturas en los cajones, al referirse a los gastos que no se han aplicado al presupuesto, "siendo procedente la misma". Ese saldo a 31 de diciembre de 2023 alcanzaba los 7,1 millones de euros, frente a los 3,6 millones del año anterior. En cualquier caso, el informe del interventor precisa que 5,7 millones de estas obligaciones se corresponden con la reclamación de Acuamed para el pago de la amortización de la desaladora, un punto sobre el que la Justicia ya se ha pronunciado a favor de las tesis municipales que rechazan ese pago.

Cuenta 413

También en este apartado de alertas económicas se sitúan los 152.000 euros de gastos de la Seguridad Social correspondientes al mes de diciembre, que han caído en esta cuenta 413 "por primera vez desde la legislación de estabilidad presupuestaria en 2012 e incluso con anterioridad", debido a que "no ha habido cobertura presupuestaria suficiente".

Los saldos de dudoso cobro (8,7 millones) y el exceso de financiación afectada (12,3 millones) lastran el superávit

Justo en el lado positivo, 0,1 %, si sitúa el ahorro neto de 2023, en cuyo cálculo entra en juego el endeudamiento. Esta variable mide "la solvencia de la entidad local, esto es, el equilibrio necesario entre ingresos y gastos corrientes para no incurrir en remanentes de tesorería negativos que generen falta de liquidez y retrasos en los pagos en el cumplimiento de sus obligaciones". En 2022, cuando el superávit apenas superó los 7.000 euros, este ahorro neto alcanzó el 2,5 %, de tal forma que el interventor alerta ahora del "descenso preocupante de cara a la liquidación del ejercicio 2024 por la senda bajista del dato".

Plazos legales

Entre las notas que acompañan al informe del interventor también destaca el cumplimiento de los plazos legales para confeccionar la liquidación antes del 1 de marzo. Después del «leve retraso» de 2021, el funcionario celebra que, desde 2022, el ayuntamiento cuenta con la asistencia técnica de las aplicaciones informáticas actualizadas de contabilidad, tesorería y fiscalización para agilizar esta labor.

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