La AVL avala el nuevo valenciano administrativo del Consell

Dictamina que «las soluciones lingüísticas adoptadas siguen el marco normativo»

Propone eliminar 8 aspectos que se apartan de la gramática, entre ellos el uso del ‘lo’ y de ‘coneiximent’

La presidenta de la AVL, Verònica Cantó, recibiendo en octubre de manos del conseller Rovira el borrador de los "Criteris Lingüístics'.

La presidenta de la AVL, Verònica Cantó, recibiendo en octubre de manos del conseller Rovira el borrador de los "Criteris Lingüístics'. / Fernando Bustamante

Rafel Montaner

Rafel Montaner

La Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) avala, aunque con algunas objeciones, el modelo de valenciano administrativo más próximo a la lengua que se habla en la calle que quiere implantar la Generalitat de Carlos Mazón, tras derogar los criterios aplicados desde 2016 por el Consell del Botànic por considerar que priorizaban las formas catalanas ante las genuinamente valencianas.

El informe que la institución normativa ha emitido sobre el borrador de ‘Criteris lingüístics de l’Administració de la Generalitat’ que ha elaborado la Direcció General d’Ordenació Educativa i Política Lingüística del departamento del conseller José Antonio Rovira respalda la mayor parte de las propuestas incluidas en las 43 páginas del documento. No obstante, la Acadèmia sí que critica que el texto "eluda no solo la explicitación de la AVL como autoridad normativa de referencia, sino también el papel de esta institución en la consolidación de un modelo formal del valenciano".

El dictamen, aprobado por unanimidad por el pleno de la AVL en diciembre, apunta que las soluciones lingüísticas adoptadas en el nuevo modelo de lenguaje administrativo "siguen el marco normativo definido por la Acadèmia Valenciana de la Llengua en sus obras normativas" excepto en 8 aspectos "que se apartan de la normativa gramatical".

El president Mazón y la presidenta de la AVL, Verònica Cantó, en la primera reunión que mantuvieron en septiembre.

El president Mazón y la presidenta de la AVL, Verònica Cantó, en la primera reunión que mantuvieron en septiembre. / Europa Press/ Jorge Gil

Conseguir una "expresión natural"

El primero es que la Generalitat, con el argumento de conseguir "una expresión natural", acepte la duplicación pronominal con complemento indirecto, algo que la Acadèmia no prevé en registros formales. Por ejemplo, en el caso de ‘li’ y ‘els’, según los criterios del Consell la frase ‘Dis-li a ta mare que vullc parlar amb ella’ pasaría a ser correcta. También rechaza la AVL que se recomiende el uso del cardinal frente al ordinal y ve incorrecto que se incluyan "las locuciones ‘a començaments de’ y ‘a finals de’ con el substantivo en plural".

El borrador recomienda introducir los meses y las estaciones del año «preferentemente con la preposición ‘en’ sin determinante», una instrucción de la que discrepa la AVL al señalar que "el uso de ‘en’ va asociado a la duración» y no es correcto cuando la expresión temporal es puntual".

El texto alza el veto al uso del artículo neutro ‘lo’ al considerar que "en comunicaciones administrativas de carácter oral y en escritos poco formales es plenamente aceptable", algo que la AVL no prevé. Para la Acadèmia se trata de una forma "coloquial" que "solo es aceptable en contextos orales o escritos en los que se hace o se representa un uso espontáneo del lenguaje".

‘Sixanta’, ‘màrgens’ y ‘afigga’

Otra discrepancia es el numeral ‘sixanta’, que la AVL rechaza mientras que la Generalitat lo considera "plenamente aceptable, e incluso preferible". Igualmente, el Consell admite el uso invariable del cardinal ‘segon’ en lenguaje administrativo oral, mientras la AVL no lo ve aceptable en registros formales. La institución normativa tampoco considera admisible que se acepte o incluso se prefiera el uso de las formas con i de ‘coneiximent’, ‘creiximent’ y ‘naiximent’ en las comunicaciones orales de la Administración con la ciudadanía.

El dictamen de los académicos recalca que "es conveniente seguir las soluciones que la AVL prioriza", pues eso "ayudaría a sacar del marco político la elección de una opción u otra", "algo que los nuevos ‘Criteris’ no siempre lo hacen". Así, la Generalitat antepone el uso de ‘màrgens’, pese a que a la institución normativa propone como solución principal ‘marges’.

Reunión entre lo equipos de la Conselleria de Educación y de la AVL el pasado mes de octubre.

Reunión entre lo equipos de la Conselleria de Educación y de la AVL el pasado mes de octubre. / Fernando Bustamante

Igualmente, el Consell acepta la variación de género del sufijo ‘-iste’ / ‘-ista’ ( ‘artiste’/ ‘artista’, ‘periodiste’ / ‘periodista’) porque "no solo es un signo característico del valenciano, sino que además es útil para reforzar la perspectiva de género", mientras que la AVL defiende la forma invariable.

También contradice la Generalitat a la AVL al primar las formas verbales ‘afigc’ i ‘afigga’ frente a ‘afija’, o ‘vore’ en lugar de ‘veure’; ‘caem’ ante ‘caiem’, ‘cullc’ y ‘cullga’ en vez de ‘cull’ i ‘culla’, ‘fon’ antes que ‘fou’, ‘mentres’ i no ‘mentre (que)’.

Adiós a ‘aquest’ y bienvenida a ‘agarrar’, ‘gasto’ y ‘despedir’

Los nuevos ‘Criteris lingüístics de l’Administració’ defienden que "en cualquier comunicación administrativa, sea oral o escrita, hay que intentar buscar siempre, dentro de la normativa, la forma más próxima al administrado". En esta línea, "con un valor de meros ejemplos de esta filosofía que prima la comunicabilidad" incluye 80 parejas de palabras en las que marca la preferencia a seguir.

La gran mayoría (73) coinciden con la prioridad fijada por la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL). Por contra el Consell prima ‘agarrar’ ante ‘agafar’ y ‘despedir’ frente a ‘acomiadar’, al contrario que la institución normativa. En las otras 5 parejas, la AVL descarta priorizar porque cada palabra tiene su propio significado, pero el Consell prefiere, por ejemplo, ‘gasto’ a ‘despesa’ y ‘despedir’ frente a ‘acomiadar’. La Acadèmia no pone ninguna objeción a la instrucción de que "cal usar sempre les formes reduïdes" de los demostrativos ‘este’ y ‘eixe’ en lugar de ‘aquest’ y ‘aqueix’.