Así será el nuevo espacio cultural del Convento de la Roqueta

El estudio Peñín Arquitectos de València presentará en los próximos días al nuevo gobierno del PP el proyecto básico para la adecuación interior como complejo cultural del convento de la Roqueta, en la calle San Vicente.

El proyecto de adecuación trata de adaptar los nuevos usos del espacio al patrimonio existente. Se integran así los restos de la iglesia tardorománica (sigl XIV) y el claustro conventual del siglo XIX asi como las fachadas del monasterio barroco del XVIII, que dejan ver la evolución del edificio y los cambios a lo largo de su historia. A pesar de la tradición que indica que la Roqueta es el lugar de enterramiento de San Vicente en las excavaciones no se han encontrado restos de época tardoantigua que hagan referencia directa al lugar de culto "vicentino".

Se han encontrado restos de la iglesia del siglo XIII construida y de las dos capillas de nuesetra señora de Betlem, construcciones que estaban parcialmente encubiertas por las potentes remodelaciones posteriores de época moderna y contemporánea. La arqueología ha posibilitado la localización de los escasos vestigios existentes y ha sacado a la luz varios enterramientos.

Los restos arqueológicos existentes y las limitaciones de un edificio declarado Bien de Interés Cultural han condicionado el proyecto de adeacuación del convento con 2.500 metros cuadrados construidos. El proyecto básico presentado por Peñín convierte el claustro del cenobio en un espacio polivalente de más de 350 metros cuadrados para organizar todo tipo de actividades al aire libre, como conciertos o presentaciones.

El edificio consta de dos accesos, lo que permiten compatibilizar el uso administrativo municipal y el público.

También en la planta baja se creará un centro de interpretación del edificio, que ocupará 260 metros cuadrados y que incluirá una tienda de publicaciones. El estudio del complejo patrimonial se ha realizado desde la doble perspectiva que aporta tanto la arqueología de subsuelo como la mural, posibilitando así una lectura estratigráfica completa del edificio. El recorrido por las estancias y deambulatorios permitirá visualizar de forma directa los restos de la historia que se podrá apoyar con audiovisuales y convertirse en un museo al aire libre con catas de subsuelo y restos murales a la vista, expone el proyecto básico al que ha tenido acceso este diario.

La superconcejalía de Cultura

Por otro lado las zonas administrativas para los servicios municipales de Recursos Culturales, Patrimonio Histórico y Artístico, Acción Cultural y Cultura Festiva previstos por el anterior gobierno de Joan Ribó, que ahora el del PP de María José Catalá tendrá que valorar se ubicarán en el primer y segundo piso del convento articulados alrededor de un amplio deambulatorio. La adecuación funcional pasa por la reserva de espacios para instalaciones en cambra o espacios bajo cubierta así como la disposición de dotaciones higiénicas, escaleras y ascensores accesibles.

Uno de los grandes retos del proyecto ha sido instalar sistemas que garanticen la sostenibilidad ambiental y eficiencia energética respetando el carácter patrimonial del edificio. Para ello se han implantado medidas pasivas y de mejora de la envolvente térmica que lo convertirán, una vez rehabilitado, en edificio casi nulo en consumo con calificación energética A. El aislamiento térmico se combina por el interior y por el exterior de las estancias y del edificio, en función de los elementos preexistentes.

El alumbrado que se ha previsto es de tecnología LED, eficiente e inteligente ya que estará regulado y controlado de forma automática tanto en el interior como en el exterior del edificio. El alumbrado exterior en el patio, incorporará además células de captación fotovoltaica, para que sean autosuficientes y no generen demanda energética al edificio.

El edificio incorporará además un sistema de monitorización y control de consumos, que mediante un sistema de inteligencia ambiental, se facilite su regulación y control de forma autónoma y automática.

Los materiales propuestos tendrán en cuenta criterios de sostenibilidad y serán mayoritariamente reciclados para fomentar la economía circular y local.

En el exterior del edificio habrá aparcabicis y puntos de recarga de VMP eléctricos.

El actual complejo de San Vicent de la Roqueta, según la tradición, fue el lugar al que se trasladó y se dio sepultura al cuerpo del diácono Vicente tras su martirio a manos de los romanos a principios del siglo IV, convirtiéndose el lugar, junto a otros como la conocida cárcel de la plaza de la Almoina, la capilla Cárcel de San Vicente y la Ermita de la Roqueta, en el origen de un arraigado culto al Santo desde época muy temprana.

El conjunto monástico de San Vicent de la Roqueta estaba formado por una iglesia, el claustro adjunto, un centro de asistencia al peregrino, un cementerio, un huerto y una pequeña ermita que conmemoraba el lugar donde fue enterrado el cuerpo del diácono. La iglesia y el edificio claustral son los únicos elementos que se conservan.

El Monasterio de Sant Vicent de la Roqueta forma parte del actual Conjunto de Iglesia y Monasterio, ámbito declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento.

Salvado de la ruina

El 25 de abril de 2018, la Comisión Territorial de Urbanismo acordó aprobar definitivamente el plan especial de protección BIC Iglesia y Monasterio San Vicente de la Roqueta de València. Después de décadas de deterioro, el Área de Desarrollo y Renovación Urbana y Vivienda inició unas primeras actuaciones de apeo y emergencia, tras las cuales acometió una primera fase de intervención general con el “Proyecto de consolidación estructural del monasterio de San Vicente de la Roqueta de València”. Las obras arrancaron en enero de 2016 y se recepcionaron en mayo de 2018.

A continuación, se llevó a cabo una intervención arqueológica que arrancó en octubre de 2019 y finalizó en junio de 2020. A partir del estudio de la documentación bibliográfica y de los antecedentes arqueológicos se han podido establecer cuatro grandes bloques cronológicos-temáticos, en los cuales se pueden englobar la mayor parte de los restos arqueológicos susceptibles de ser integrados en la próxima habilitación del monasterio de la Roqueta:

• De los orígenes a la conquista feudal de 1238
• La conquista feudal y la restauración del culto
• La gran reforma. siglos XVII-XVIII
• La desamortización: abandono y deterioro. siglos XIX-XX

La Junta de Gobierno Local con fecha 31 de marzo de 2021, aprobó una Moción de Alcaldía -Presidencia, en la que se propuso destinar el Monasterio de San Vicente de la Roqueta a edificio municipal de servicios culturales y se encargó al Servicio de Proyectos Urbanos las actuaciones para llevarlo a cabo

Con este Proyecto de Habilitación se pretende atender a dicha petición y conferir la mayor legibilidad del inmueble desde el punto de vista patrimonial. Para ello el proyecto garantizará la conservación volumétrica y material del edificio y apostará por la conservación de las aportaciones más significativas.

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