Servicios Sociales

Protestas contra Igualdad por no pagar la subida salarial prometida a los trabajadores de servicios sociales

El sindicato UGT se ha manifestado y ha hablado con la consellera, que pide tiempo y achaca los retrasos a la deuda que dejó el Botánic en herencia

Sindicatos y patronal rubricaron el año pasado un acuerdo que aumentaba el salario de los trabajadores hasta 700 euros al mes en 4 años, con el objetivo de equipararlos con los empleados de Educación y Sanidad

La vicepresidenta Susana Camarero dialoga con los trabajadores de servicios sociales que se manifiestan frente a la sede de Conselleria.

La vicepresidenta Susana Camarero dialoga con los trabajadores de servicios sociales que se manifiestan frente a la sede de Conselleria. / Levante-EMV

Gonzalo Sánchez

Gonzalo Sánchez

El sindicato UGT se ha concentrado este jueves frente a las puertas de Conselleria de Igualdad para pedir que se cumpla la subida salarial para 15.000 empleados de servicios sociales firmada en marzo de 2023.

Se trata de un acuerdo "histórico", según lo definieron sindicatos y patronal, porque supone dignificar las condiciones de los trabajadores de servicios sociales y ponerlas al nivel de Sanidad y Educación. Esto incluye a los trabajadores en centros concertados. Un ejemplo; una enfermera de una residencia pasará de cobrar 1.4450 euros a más de 2.100.

Fuentes del sindicato apuntan que la vicepresidenta y consellera de Igualdad Susana Camarero (PP) les ha pedido tiempo, ya que tiene que lidiar con la deuda que dejó la anterior conselleria de Compromís en herencia. En concreto, deben priorizar los pagos a las entidades sociales.

Otro problema es que es necesario licitar los nuevos contratos con los centros y aprobar las nuevas tablas salariales. Un proceso que según ha explicado Camarero al sindicato puede llevar muchos meses. Igualdad se está centrando ahora en buscar una solución para desatascar la subida salarial, que puede ser mediante una licitación.

Subida presupuestada

Esta medida era una de las novedades de los presupuestos de la Generalitat para el año 2023. La exvicepresidenta y consellera Aitana Mas aseguró que reservaron 50 millones de euros para esta inversión en mejoras salariales. Un proceso que, según Mas, no tiene precedentes. La subida empieza este año 2023 y acabará en el 2026.

Durante la presentación de esta medida en Les Corts, Mas puso como ejemplo el del personal de servicios generales, es decir, limpieza, mantenimiento, cocina, etc... Mientras hoy ese salario es de 969 euros, es decir, un salario base por debajo del salario mínimo, en 2026 cobrará 1.430 euros.

En el caso de las residencias, al tratarse de un sector tan privatizado, la realidad es que solo 55 de las 329 residencias que hay en la C. Valenciana subirán los salarios a la altura de las residencias públicas. El acuerdo alcanzado por Igualdad solo alcanza a las concertadas, así que es decisión de la patronal de las residencias privadas cambiar sus salarios.

La cuarta pata del estado del bienestar

Esta equiparación salarial es una reivindicación histórica de los trabajadores de esta conselleria, y que se concretó el año pasado a través de una inversión que también incrementará la financiación a los ayuntamientos para que paguen más a la plantilla que depende de ellos.

El espíritu de esta reforma viene del año 2015, con la llegada del tripartito de izquierdas a la Comunitat Valenciana. Entonces la exconsellera de Igualdad Mónica Oltra explicó su objetivo de convertir los servicios sociales en la "cuarta pata del estado del bienestar", a la misma altura que Sanidad y Educación. Ocho años después este plan comienza a materializarse a través de la equiparación salarial.

La reforma tiene dos partes, por un lado, "el inicio del proceso de mejora de las condiciones de los trabajadores y trabajadoras del sistema público valenciano de servicios sociales para el que se aumentará el módulo de financiación a los ayuntamientos, y, por otro lado, se iniciará el proceso de homologación salarial de los empleados del ámbito de concierto social con el resto de personal", según anunció la vicepresidenta Aitana Mas en la rueda de prensa de presentación de los presupuestos. Igualdad asegura que se acabará con "esta discriminación histórica", en un año.

Fuga de trabajadores a Sanidad

Se trata de una reforma muy importante, ya que los bajos sueldos en el sector de la inclusión y servicios sociales llevaban años provocando que muchísimas personas del sector sanitario (enfermeros y enfermeras o fisioterapeutas, por ejemplo), decidieran trabajar para conselleria de Sanidad en lugar de en residencias públicas o concertadas, donde las condiciones y los salarios solían ser mucho peores.

Esta equiparación viene a atajar este problema para evitar la migración de profesionales a consellerias como la de Sanidad o la de Educación y a mejorar los contratos que ya existen en Igualdad. Pese a todo, la falta de trabajadores de Enfermería es patente desde hace años tanto en Sanidad como Igualdad, tanto es así que este verano se detectó personal sin el título trabajando en residencias de mayores, ante la escasez de profesionales cualificados.